CAPITULO X
CLUB NAUTICO
Traducido y editado por: Patricia Pinto
Estoy desconcertado sintiendo mucho miedo
por mi propia admisión. ¡Lo dije
en voz alta! Por fin lo he
admitido. Le he dicho a esta diosa que está delante de mí el sentimiento más
guardado. Mis entrañas están girando y tengo
esa desgarradora sensación de que soy indigno de amarla. Anastasia se ve alegre, feliz, y ella
tiene ese amor incontenible y el anhelo por mí en su mirada.
In Her Eyes - Josh Groban
Ella
se ve tan inocente, tan atractiva, tan celestial, y eso me hace sentir como una
mierda; un hombre desprovisto de
alma no debe ser el amor de una chica así. No
puedo soportar la forma en que me mira, como si nada existe para ella sino solo
yo en el universo. Recuerdo lo que dijo Sydney Carton en un momento así. “Yo soy un esclavo que te ha decepcionado señor. No me preocupo por ningún hombre en la
tierra, y no hay hombre sobre la tierra que se preocupe por mí”
Eso es lo que pienso de mí y niego que mis sentimientos salgan a la superpie. “El amor es una emoción inútil, debilita al hombre” El objetivo final del mismo, lo puedo conseguir por otros medios, sin necesidad de cargar el equipaje que trae. Y ahora aquí estoy al descubierto y con mucho que ocultar, pero no tengo donde esconderme. Estoy frente a este ángel que viene extrayendo con habilidad la miseria de mi existencia. Una existencia llena de capas, pero cuando se levantan todas, estoy es lo que soy. Estoy abierto a ella. Todo esto es nuevo para mí. ¡Yo nunca, jamás le pronuncié estas palabras a nadie en mi vida! ¡Ni a mis padres, ni a mis hermanos, ni a ningún ser viviente! Nunca amé. Definitivamente soy como Sydney Carton hoy. “He tenido esta debilidad, la debilidad de desear repentinamente que ella lo sepa. Me siento como un montón de cenizas en el fuego”
El amor de Anastasia es mi resurrección. El amor de Sydney no fue correspondido. Estuve asustado y sorprendido de saber que Anastasia me ama, pero ahora que lo sé, no puedo prescindir de él. "Quiero abrazar cualquier sacrificio por nosotros y por nuestros seres queridos” dijo Sydney a Lucie. Esa era la única manera real de que pudiera dar su amor por ella. Yo también haría cualquier sacrificio por Anastasia, a excepción de verla con otra persona. ¡Moriría antes de permitir que eso suceda! No soy más que un hombre egoísta. Sydney Carton tuvo un sueño que terminó en nada. Pero él le dijo a Lucie que lo inspiró en el sueño. Yo no quiero que esto sea un sueño con Anastasia. Quiero vivir en ella. Quiero experimentar, que sea para mí. ¡Solo para mí! Yo no soy el tipo de hombre que abandona una pelea. Y yo lucho para ganar. Si eso es necesario para tenerla, me gustaría hacerlo con cualquier persona que se atreva a desafiarme.
Anastasia llega hasta mí y me estrecha la cara con sus manos y me da un beso… me besa con una pasión tan gentil; hace que se detenga el tiempo y derrite mi corazón. Nuestros sentimientos van en aumento mientras fluyen a través de nuestro beso, nuestro vínculo. Su suave beso es más apasionado cuando el agua tibia cae como lluvia sobre nosotros. Todo mi ser se estremece y gimo cuando la tomo entre mis brazos, sosteniéndola cerca de mi cuerpo, de mi corazón y de mi alma. ¿O es al revés? Cuando ella está tan cerca, pienso que tengo un corazón y un alma. Ella los alimenta. Ella me complementa.
_ Oh Ana… susurro con una voz tan llena de
emociones que no puedo decir con palabras. Te
quiero, pero no aquí. Tengo mi manera de expresarle mi amor. Todo lo demás es
nuevo para mí. Esta es mi manera de asegurarme de
que estamos bien, además es una manera que nos encanta y es mi manera de
consolarla.
When You Say You Love Me - Josh Groban
_ Sí, murmura en mi boca con tantos
deseos.
Cierro el agua de la ducha, la llevo fuera
y la cubro con su bata de baño. Entonces me pongo una toalla alrededor de mi
cintura. Agarro otra toalla y traigo a
Anastasia cerca de mí y comienzo a frotarle suavemente su cabello, para secarlo
lo más que puedo. Este acto es simplemente íntimo y familiar y sin embargo hay una
cualidad sensual en él. No
hay palabras involucradas. Sólo la estoy tocando con un sentimiento de amor y
de estima. Cuando veo que no está goteando,
le envuelvo la toalla alrededor de su cabello, y cuando ella levanta la vista
para mirarse en el espejo, nuestras miradas se conectan. Anastasia tiene un brillo en sus ojos.
_ ¿Puedo corresponder? Me pregunta.
Me muero porque ella me toque, pero la
sensación es nueva y abrumadora, la aprehensión se arrastra de nuevo sobre mí. La miro y asiento afirmativamente. Yo
quiero hacer esto. Sin embargo
todavía estoy nervioso. Sin
parpadear, mi mirada sigue a Anastasia. Ella
toma otra toalla de la pila, y se pone de puntillas para llegar a mi cabeza. Me agacho para que tenga un acceso más
fácil y pueda secar mi pelo. No creo haber permitido jamás que alguien me haga
esto. Ni siquiera cuando me adoptaron. Le
dolía a mi madre no poder cuidar de mí como una madre querría, pero aprendí a
ser autosuficiente desde que era niño para que nadie me toque. Sin
embargo, para mi sorpresa, me parece que me gusta que ella haga esto y por
alguna razón inexplicable, comienzo a relajarme y me siento feliz como un niño
con una sonrisa de oreja a oreja. Como si fuera una mañana de Navidad.
_ Hace tiempo que nadie hace esto por mí. Mucho
tiempo. De hecho creo que nadie me ha secado el pelo jamás, le digo.
_ Seguramente Grace lo hizo. ¿Cuándo eras
niño tal vez? Pregunta Anastasia.
Niego con la cabeza, mientras ella sigue
secando.
_ No, ella
respetó mis límites desde el primer día, a pesar de que fue doloroso para ella. Yo era muy autosuficiente de niño, le
digo con voz baja. Tenía que ser
autosuficiente; de hecho creo que
fui yo quien se preocupaba por la puta morena en vez de ella por mí. Pero yo no quiero echar a perder con
malos recuerdos lo que tenemos en este
mismo momento.
_ Bueno, me siento honrada, dice ella con
dulzura.
_ Puedes sentirte, o tal vez soy yo el que
debería sentirme honrado.
_ Eso no hace falta decirlo, señor Grey,
dice aun burlándose.
Una vez que ha secado mi pelo, toma una
toalla de mano de la pila y se mueve a mi alrededor para estar de pie detrás de
mí. Nuestros ojos se encuentran
en el espejo. Ella quiere hacer
algo más, pero no quiero saber lo que es. Todavía
no puedo dejar de darle una mirada inquisitiva en el espejo.
_ ¿Puedo probar algo? Pregunta. Lo sé, me quiere secar. Las palabras se atascan todas
amontonadas en mi garganta y se bloquean para salir. Todo lo que puedo hacer es
asentir. Poco a poco toma la
toalla y seca todas las gotas del brazo
izquierdo. Observo sus
movimientos en el espejo, miro a la mujer que sin ayuda de nadie me abrió como un
Gran Bazar. Cuando se da cuenta que
mi mirada está sobre ella, ella detiene su mirada para encontrarse con mis ojos
en el espejo, ardiendo de emoción. Justo
en ese momento, sin romper su mirada conmigo, ella se inclina y coloca un suave
beso en mi bíceps. Es un
movimiento muy pequeño, pero infinitamente amoroso, un escalofrío recorre mi
cuerpo y jadeo, mis labios se abren para dar cabida a la creciente necesidad de
atención que hay en mí. Ella se
mueve a mi brazo derecho y persigue las gotas de agua con la toalla pequeña. Una vez que completa su misión, ella
corre un camino de besos por mis bíceps y extrañamente, me encanta el gesto
sensual. ¿Cómo es posible que
algo que me asusta hasta la muerte sea tan increíblemente excitante? Una sonrisa se arrastra hacia mis
labios.
Entonces la mirada de Anastasia y la mía
convergen de nuevo en el espejo. Ella pasa toda la toalla con cuidado por
debajo de la marca de lápiz labial en mi espalda. Quiero que me toque. Quiero
sentirla. Que ella sepa lo mucho que significa para mí. ¡Con la declaración de mi amor
por ella un volcán de emociones se levanta en
mi pecho!
More Than Words - Extreme
_ Toda la espalda con la toalla, le digo
en voz baja. Tengo que hacer
esto. Ha pasado el tiempo
suficiente. Tengo que conquistar
este último pedazo de territorio con ella. Tomo una inhalación brusca para
suprimir el diablo que se asoma y que siempre he mantenido a raya. Cierro los ojos con fuerza. ¡Listo! Anastasia hace lo que le pido de forma
rápida. Cuando termina quita la
mano y finalmente suelto la respiración. Ella premia mi valentía con un beso en
el hombro. Luego pone sus brazos
alrededor de mí para secar la parte de mi estómago que está en la zona segura. Pero que alguien me toque, incluso
Anastasia en donde no he sido tocado por mucho tiempo supone una lucha
titánica. Estoy preocupado por si
en cualquier momento ella se aparta de la línea, aunque sé que no lo hará.
_
Sostén esto, me dice y me entrega una toalla seca. Una sensación de confusión
me hace fruncir el ceño. ¿Qué estará pasando por su hermosa cabeza?
_ ¿Recuerdas cuando estábamos en Georgia? Me hiciste tocarme usando tus manos.
Es uno de los mejores recuerdos que tengo. Mi mirada se oscurece con el deseo. Sin decir una palabra, la miro por el
espejo. Mi mujer, la chica que me
pertenece está haciendo todo lo posible por llevar a cabo una tarea que se
supone que es normal, una acción natural que cada pareja hace. Pero para mí es
algo muy íntimo y delicado. No hay nadie que se pertenezca tanto ahora como lo
estamos nosotros. Su mano suavemente alcanza la mía y la tomo confiando en
ella. Guío su mano para secar mi pecho.
Tener el control de lo que está haciendo, me hace sentir seguro. Yo puedo hacer
esto. Yo estoy a cargo. Ella está haciendo todos sus movimientos bajo
mi control. Pero pasar por sobre
las cicatrices, desencadena una nueva emoción, trayendo recuerdos torturantes
de vuelta que quiero mantener ocultos. Mi cuerpo se tensa, pero voy a seguir con
esto. Confío en ella. Confío en ella. Confío en Anastasia. Es mi mantra. Su mano en la mía se desliza sobre mi
torso con torpeza. Nunca estoy
incómodo con nada físico si es sexo o ejercicio. Pero esto... Esto es incómodo. La ansiedad rueda a través de mí. El tiempo se detiene, sólo oigo el
sonido amplificado de la toalla sobre mi torso sin respirar. Nada más.
_ Creo que estás seco ahora, ella susurra
en voz baja, y un sensación de tranquilidad me inunda. Pero también hay algo
que crece exponencialmente en mí. Es la necesidad que tengo de ella. Tengo que
tenerla, unir nuestros cuerpos, nuestras almas. ¡Tengo que abrazarla hacerle el
amor ahora!
_ Te necesito, Anastasia, le susurro
con fervor.
Make you Feel My Love by Adele
_ Yo también te necesito, contesta tomando
una bocanada de aire.
_ Déjame amarte, le digo con mi voz
cargada de emoción.
_ Sí, dice ella, me doy la vuelta más
rápido que Superman y la meto entre mis brazos, mientras mis labios buscan los
suyos, yo la adoro, la amo, le imploro que me quiera también. Ella es mía y
solo mía. Cuando la beso quiero consumirla con todo mi amor y deseo. Me doy
cuenta de que es a ella la que quiero, la que aprecio, la que amo con toda mi
existencia. La quiero con todo lo que soy: Jodido, voluble, amoroso, cambiante,
exigente, posesivo, enamorado, asustado, preocupado, obseso del control, dios
del sexo… con todas mis cincuenta sombras… ¡ella me encanta!
Entro en el dormitorio completamente
consumido por ella, con mi mujer envuelta alrededor de mi torso; y la acuesto sobre la cama.
_ ¡Déjame hacerte el amor Ana! Le suplico. Te quiero enseñar lo que significas
para mí... Déjame adorarte con mi cuerpo... le digo mientras cubro su cuerpo con
el mío.
Your Body Is a Wonderland - John Mayer
El calor viene de mis brazos y de mi
cuerpo... y una creciente tensión en las piernas y el pecho. Mis labios se van
a los suyos reclamándolos, mi lengua lanzándose en su boca, buscando la de
ella. Es una cata dulce la boca
de Anastasia. Ella me consume de la
misma manera, pasa su lengua por mi labio inferior lo muerde ligeramente
haciéndome gemir más. La fiebre fluye a través de nuestros cuerpos. Le doy
besos por su garganta y ella arquea su cuello para darme un fácil acceso. Sonrío. Mi mano va camino a la parte baja de
su espalda levantándola de la cama ligeramente, mientras que la otra mano la arrastro
por la cadera y la pierna. Bajo hasta su clavícula, luego hacia su esternón,
marcando un camino con mi lengua mientras viajo. Siento los latidos de su
corazón debajo de mis labios, su pecho sube. Ella levanta su cuerpo del colchón
para satisfacer a mis labios que necesitan de ella. Mis labios se mueven sobre
su pecho, lamiendo, mordiendo, jugando. Ella
corta su respiración un poco más.
_ ¡Oh, por favor, Christian! Suplica. Tomo su pezón con la boca, chupando,
mordiendo suavemente, haciéndola jadear y gemir de placer puro. Mi mano derecha se desplaza para
encontrar su otro pecho y comienzo a trabajar en él con la palma de la mano. Tomo su pezón entre el pulgar y el
índice y repito los mismos movimientos que hago con mi lengua en su otro pecho.
El mundo se desvanece y sólo existe Anastasia. Soy tacto, gusto, olfato, oído. Estoy inmerso en ella en todas las formas posibles.
She’s So High - Tal Bachman
_ Tienes un olor que me pone duro al
instante Anastasia... murmuro. Toda
celestial, toda mujer. Y los
sonidos que hace... yo podría seguir amándola, besándola, llevarla a caballo
hasta la eternidad. Yo quiero amarla y ella quiere que la ame. Responde a cada
beso, cada caricia. Estamos tan
en sintonía el cuerpo del uno con el otro. ¡Estoy
incompleto sin ella!
Ella arquea sus caderas y se frota con mi
cuerpo. ¡Santo cielo! Mis labios viajan hasta su ombligo y voy
metiéndome entre sus piernas haciéndola jadear. Al bajar a su sexo, mis labios chupan
en su dulce feminidad. Ana cómo
siempre, con un sabor delicioso, como el néctar de una flor, húmeda y caliente.
Ella levanta las caderas mientras
sostengo sus nalgas con fuerza y da un gemido de placer. Toma mi cabello entre sus manos y se aferra fuerte, no me voy nena estoy aquí para ti… Sigo saboreando, chupando mientras
comienza a mover sus caderas en pequeños círculos en
mi boca y arqueando su espalda grita mi
nombre mientras se corre desesperadamente y yo me llevo hasta la última gota de
su placer.
_ Por favor, Christian… ¡Te quiero dentro de mí! Me pide
jadeando. No puedo soportar no hacerlo
cuando ella lo está pidiendo de esta manera.
_ ¡No sabes lo mucho que me gusta hacerte
venir Ana!
_ ¡Dámelo ya Christian! Ella gime,
haciéndome sonreír bastante.
Ana tiene los ojos brillantes, sus mejillas
rosadas y se muerde el labio de esa manera que me vuelve loco. Me pongo un
condón y la beso apasionadamente.
_
Sí, señora Taylor, le digo cuando poco a poco y me adentro entre sus pliegues y
siento como va expandiéndose para darle cabida a toda mi hombría. Joder que
bien se siente estar atrapado en ella. Suave, cerrada, resbaladiza, húmeda y
caliente. Mis brazos están
justo al lado de su torso, mientras rítmicamente voy dentro y fuera de ella, la
boca de ella cubre de nuevo la mía, probando su propia excitación. Siento los músculos de Anastasia
apretando a mí alrededor; deliciosas sensaciones pasan a través de la punta de
mi polla por todo el resto de mi longitud, y siento todo mi cuerpo envuelto en
un placer dichoso.
_ Vamos cariño dámelo, y como si mis
palabras fueran su detonante ella se corre de nuevo gruñendo. Meto mis manos
por su espalda y me volteo rápidamente, sin deshacer nuestro preciado contacto,
quiero verla.
_ Así nena, quiero verte. Ella está jadeando
y recostada sobre mi pecho, dobla completamente sus piernas y ahora sus
rodillas están apretando los lados de mi cintura, estoy atrapado en ella. Comienza
a mover sus caderas a un ritmo deliciosamente lento, agotada, pero todavía con
ganas. Sale y entra haciendo movimientos circulares ¡Dios me está matando aquí!
Sigue con su lenta tortura, saliendo y entrando
en círculos, busca mi boca y me chupa la lengua duro. Quiero que se lleve todo,
así que cada vez que baja hasta el final yo empujo con fuerza para que lo
sienta completo. No hay nada mejor en este mundo que estar dentro de Anastasia.
Pero no aguanto más, necesito construir alrededor de ella y la apremio.
_ Ana cariño vamos, ahora por favor…
Comenzamos a
empujar con fuerza cada uno con su embestida, construyendo juntos, escalando…
dándonos el más puro placer, mis manos van directamente a su trasero trayéndola
hacia mí, su cara ahora está metida en mi cuello y sus manos enredadas en mi
pelo. La siento cuando se tensa, cuando me envuelve y se corre jadeando. Yo me
descargo dentro de ella diciendo entre dientes mi revelación ¡Ana, cariño, te
amo!
Cuando los dos nos bajamos de nuestra
felicidad y estamos completamente saciados, paso
perezosamente los dedos por su cuerpo mientras yacemos juntos. Anastasia está boca abajo abrazando su
almohada y estoy de lado, apenas tocando a mi mujer. ¡Mi mujer! ¡MIA!
Crazy For This Girl - Evan and Jaron
_ Así que usted puede ser tierno, murmura
toda satisfecha.
_ Hmm... Parece que sí señorita Steele, le
digo sonriendo.
_ No lo fuiste la primera vez que hicimos
esto, comenta recordando.
_ ¿No? Sonrío hacia ella. Ese fue el primer momento en que puse mi
derecho sobre ella. Cuando te robé la virtud, le digo.
_ No creo que me la robaste. Creo que mi virtud te la entregué
libremente y de buen grado. Yo también quería y lo disfruté bastante, sonríe tímidamente
mordiéndose el labio.
_ Como yo, si mal no recuerdo señorita
Steele. Mi único objetivo es complacer. Y eso significa que eres mía, por
completo, le recuerdo. Ella es
mía y de nadie más.
_ Sí, lo soy, dice en voz baja con
afirmación. Quería preguntarte
una cosa, dice.
_ Adelante.
_ Tu padre biológico... ¿Sabes quién era?
Este es un tema que no quiero discutir,
pero Anastasia es curiosa. Me ha
molestado mucho pensar que el hombre que abusó de mí podría haber sido mi
padre. ¡Gracias a Dios que no lo era!
_ No tengo ni idea. No era ese salvaje que hacía el papel de
chulo, lo cual está bien.
_ ¿Cómo lo sabes?
_ Por una cosa que me dijo mi padre…
Carrick. La observo y veo en su rostro expectativa, esperando que le dé la
información. Ella ahora es todo oídos.
_ Siempre ávida por saber Anastasia,
suspiro. Sacudo la cabeza con disgusto fingido. El proxeneta descubrió el
cuerpo de la puta adicta al crack y llamó a la policía. Aunque tardaron cuatro
días en encontrarlo. Él cerró la puerta y me dejó con su cadáver, le digo. Esa
escena se reproduce en mis pesadillas casi todas las noches.
Anastasia se horroriza y cambia su mirada
a una sombría, haciéndola inhalar bruscamente ante la imagen.
_ La policía lo entrevistó después. Negó rotundamente que tuviera que ver
conmigo y Carrick dijo que no se parecía en nada a mí.
_ ¿Recuerdas cómo era?
_ Anastasia, esa es una parte de mi vida en
la que no suelo pensar mucho. Sí me acuerdo cómo era. Nunca lo olvidaré. El
recuerdo de ese hijo de puta haciéndome daño y yo sin poder defenderme, no es
algo de lo que quiera hablar después de hacer el amor de una manera alucinante.
La ira se eleva de forma natural en mí.
_ ¿Podemos hablar de otra cosa?
_ Lo siento. No quise molestarte, Christian, ella
contesta.
Sé que eso está en el pasado, pero es como
recordar el mal sabor de la mierda justo después de haber comido un postre
exquisito. No combina.
_ Es el pasado Ana. No quiero pensar en
eso ahora.
_ Entonces, ¿Cuál es la sorpresa?
Pregunta. ¡Ella siempre quiere saber todo, pero esto es una sorpresa de la cual
no puedo revelar nada!
_ ¿Te gustaría salir a tomar un poco de
aire fresco? Quiero mostrarte algo.
_ Por supuesto, responde.
Yo sonrío como un idiota. Quiero tanto hacer esto con ella y es
mi tercer pasatiempo favorito en el mundo ¡Estoy
muy feliz!
_ Vístete. Unos jeans estarán bien. Espero que Taylor haya metido unos
para ti, le digo.
Me salgo con rapidez de la cama y me pongo
mis boxer. Ella está sentada en la cama comiéndome con los ojos. ¡Mi pequeño
diablillo!
_ Arriba, le regaño, pero ella sigue
mirándome sonriendo, viendo lo que le pertenece, o sea ¡yo!
_ Sólo estoy admirando la vista, dice ella
volteando los ojos.
Nos movemos
eficientemente entorno a nosotros, como si fuéramos una pareja de muchos años,
completamente sincronizados con nuestros cuerpos. Sin embargo esto es algo
nuevo para los dos y me siento un poco tímido con este nuevo tipo de intimidad.
Una vez vestidos finalmente, cada uno captura la mirada del otro por el espejo,
sonriendo tímidamente con cariño.
_ Seca tu cabello, le ordeno después de
que ella se ha vestido.
_ Dominante como siempre, responde ella sonriendo,
y llenando mi corazón de alegría. A
pesar de que parece quejarse, yo sé que a ella le gusta cuando yo
estoy a cargo.
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Me
inclino y beso su cabello. Sí,
está mojado.
_ Eso nunca va a cambiar, bebé. No quiero que te enfermes. Me voltea
los ojos y yo sonrío con picardía.
_ Sigo teniendo las manos muy largas ¿sabe
señorita Steele?
_ Me alegro de oír hablar de eso, Sr.
Grey. Empezaba a pensar que ya habías
perdido nervio, replica.
_ Puedo demostrarte que no es así en
cuanto quieras.
Saco del bolso mi suéter y lo coloco por
encima de mis hombros. Ahora estoy vestido con vaqueros y camiseta, y si lo
necesito más tarde mi suéter está disponible. Miro
hacia Anastasia. Ella tiene puesta
su camisa azul claro, y los vaqueros. Se
inclina hacia abajo y sacudiendo su cabello comienza secarlo. ¡Buena chica!
*****
_ ¿A dónde vamos exactamente? Pregunta
mientras estamos a la espera de mi coche. No
le voy a decir mi secreto todavía. Le doy un guiño. Su curiosidad lo
único que hace es llevar al máximo mi alegría. Apenas puedo contenerme, ya que es
evidente que ella está sacando conclusiones en su cabeza de a dónde la podría
llevar. Ya me imagino esos engranajes girando en su cabeza tratando
de descifrar. ¡Me encanta este
juego con ella! Me inclino y la
beso suavemente.
_ ¿Tienes idea de lo feliz que me haces? Le susurro.
_ Sí... lo sé perfectamente. Porque tú tienes el mismo efecto en mí, dice
ella, y para cuando el valet se detiene con mi coche, los tres tenemos sonrisas
de oreja a oreja, todos por diferentes razones.
_ ¡Un gran auto señor! Murmura el valet
cuando me entrega la llave. Le doy
un guiño y ya que estoy muy feliz hoy, lo recompensaré con doscientos dólares.
Anastasia me mira con reproche. El valet se tropieza con las palabras, umm…
gracias… señor Taylor…
*****
Después de salir del hotel, entramos en el
tráfico. Voy a tener que retrasar
mi sorpresa un poco con el fin de rectificar algo para Anastasia. Me molestó mucho que Leila fue capaz
de localizar su coche, bueno, claro, como Anastasia dijo, era el modelo
"especial sumisa." Pero Anastasia nunca ha sido mi sumisa. Ella es mi novia. Ella está en un nivel mayor. Ella
es todo. Nuestras almas están hechas de
la misma manera. Cuando estamos juntos, vamos sincronizados. Somos como el Ying
y el Yang. La mitad de ella es mi alma, y la mitad mía está en su
corazón.
Half of My Heart - John Mayer
¿Cómo podría yo darle el especial de
sumisas?
Me molesta que lo hiciera. Es hora de cambiar esta situación.
_ Tengo que hacer un desvío. No va a tomar mucho tiempo, le digo mientras
mi mente está afanosamente ocupada con mis pensamientos.
_ Claro, murmura perpleja.
Caigo de nuevo en mis pensamientos cuando
la voz hipnotizante de Eugenia Laguna canta en el fondo .
Fifth Element Diva Song - Evgenia Laguna
Miro a Anastasia a través de mi visión
periférica. Ella es diferente. Ella no es una sumisa. ¡Y ella sería una terrible de todos
modos! Me sonrío pensando en eso. Justamente la amo por su espíritu rebelde.
Desafía mi lado Dominante. Estoy decidido a darle el puesto que se merece. Así
que no, un auto especial de sumisa no va para mi novia. El de ella tiene que
ser distinto. Además es mi primera novia y mis primeras veces en muchas
maneras. Es la única mujer que he amado. La
miro con determinación para demostrarle que ella es diferente para mí.
Salgo de la autopista y tomo a la
izquierda en dirección al estacionamiento de un concesionario de Saab.
_ Tenemos que conseguir un coche nuevo, le
digo. Su boca se abre. Sé que esto no es lo que estaba
pensando cuando me desvié.
_ ¿No es un Audi? Ella pregunta aturdida.
_ Pensé que te gustaría cambiar, murmuro,
casi tímido. Sé que admití que la
amo, pero todo es diferente con ella, nuevas experiencias, nuevas emociones que
nunca pensé que podría vivir. Me pongo
nervioso.
_ ¿Un Saab?
_ Sí. Un
9-3. Vamos, digo tomando su mano con
la mía como si alguien más lo reclamará antes que yo.
_ ¿Qué pasa contigo y los coches
extranjeros?
_ Los alemanes y los suecos hacen los
coches más seguros en el mundo, Anastasia.
_ Creí que habías encargado otro Audi A3
para mí.
Oh, nena, soy Christian Grey. Nadie va a discutir conmigo si yo
decido o no comprar algo.
_ Eso se puede cancelar, le digo tirando
de ella.
_ Te debo un regalo de graduación. Ella va a tener su regalo adecuado
hoy.
_ Christian realmente no tienes que hacer
esto.
_ Sí, quiero hacerlo. Vamos por favor, le
digo con firmeza. Ella suspira y
me sigue. Un vendedor con acento
de Nueva Inglaterra llamado Troy Turniansky, ve los signos de dólar cuando nos
ve.
_ ¿Un Saab, señor? ¿De segunda mano? Me pregunta mientras
se frota las manos como esos personajes de dibujos animados que están listos
para saltar sobre uno y sacarte todo lo que posees.
_ Nuevo, le digo con firmeza, casi insultado.
_ ¿Tiene algún un modelo en mente, señor?
_ Un Sedan deportivo 9-3 2.0T.
_ Una excelente opción, señor. ¡Por
supuesto que sí! Ya lo he
revisado.
_ ¿De qué color, Anastasia? Le pregunto
inclinando la cabeza.
_ ¿Er... negro? Me contesta con una
pregunta. Realmente no tienes que hacer
esto, dice ella frunciendo el ceño ¡Qué fastidio con Ana y mis regalos! ¡Si
quiero comprarle un coche a mi novia, voy a hacerlo! ¡Y, no será negro, si puedo evitarlo! La gente no lo ven tan fácilmente como
otros colores.
_ Negro no es fácil de ver en la noche,
declaro lo obvio.
_ Tú tienes un coche negro, ella replica. Sí, pero yo soy mejor conductor.
_ Pues amarillo canario entonces, dice
encogiéndose de hombros.
Hago una mueca por su elección. ¡Sé seria!
_ ¿De qué color quieres tú que sea coche? Me
pregunta. Ella sabe que yo quiero elegir el color, no puedo apartar mi lado
dominante tan rápido.
_ Blanco o plateado, le contesto.
_ Plateado entonces. Tú sabes que me puedo quedar con el
Audi, dice ella. La sangre drena
la cara del vendedor con la posibilidad de que puede perder la venta y su
comisión.
_ ¿Tal vez le gustaría que un
descapotable, señora? Le pregunta, con mucho entusiasmo. No estoy seguro de si me gusta la idea
de un convertible. Demasiado
peligroso para ella.
_ ¿Convertible? Le pregunto, levantando
una ceja, mirándola. Ella mira
hacia sus manos. Es evidente que se siente incómoda con el regalo, pero yo
quiero hacerlo y quiero que sea un coche seguro para ella. Cuando Anastasia baja la vista hacia
sus manos, vuelvo mi mirada hacia el vendedor
¿Cuáles son las estadísticas de seguridad
del convertible?
_ ¡Me alegra que lo pregunte señor! Este coche ha ganado los honores de
seguridad durante cuatro años seguidos. Tiene un equipo de seguridad estándar
tales como bolsas de aire laterales, frontal y trasera, tiene control de estabilidad,
frenos antibloqueo. Además de eso, el control de tracción del vehículo pasó
magníficamente las pruebas de volqueo. Continúa por casi diez minutos hablando
de las características de seguridad del automóvil. Estoy contento. Cuando me doy la vuelta, encuentro a Anastasia
sonriéndome por alguna razón que desconozco. Estoy
perplejo y sorprendentemente divertido por su reacción ante mí.
Mientras continúa hablando el vendedor, le
pregunto si tiene uno disponible. Me dice que no pero que lo puede ubicar. Asiento
con la cabeza, y él está feliz de hacerlo. Cuando
se ha ido a su ordenador, me inclino hacia Anastasia.
_ Yo también quiero un poco de lo que ha
tomado, sea lo que sea señorita Steele.
_ Lo que me he tomado es a usted, señor
Grey, ella responde.
_ ¿En serio? Bueno, pues la verdad es que pareces
que estás embriagada, le digo mientras la acerco a mí y le robo un beso. Y gracias por aceptar el coche. Ha sido más fácil que la última vez.
_ Bueno, no es un Audi A3, me dice sonriendo. La edición sumisa no es el adecuado
para ella.
_ Ese no es el coche para ti.
_ A mí me gustaba, dice.
_
Señor, ¿el 9-3? He localizado uno en nuestro
concesionario de Beverly Hills. En un
par de días podemos tenerlo aquí, dice prácticamente emocionado.
_ ¿De gama alta? Le pregunto. Yo no quiero un mínimo de error para
ella.
_ Sí, señor.
_ Excelente, le digo y saco mi tarjeta de
crédito para pagar por el coche.
_ Si quiere acompañarme señor, dice y
leyendo el nombre de la tarjeta dice, Grey. Y tan fácil como eso compramos el
coche de Anastasia.
Una vez que terminamos nuestra transacción,
me voy con Ana devuelta al coche, le abro la puerta y ella me da las gracias
por el regalo.
_ Lo hago con mucho gusto Anastasia.
Cuando enciendo el coche de nuevo, la
música vuelve a sonar.
_ ¿Quién es? Ella pregunta.
_ Eva Cassidy, le digo.
_ Tiene una voz preciosa, Anastasia
observa.
_ Sí, la tenía. Ella murió joven, afirmo, sombrío.
Fields of Gold - Eva Cassidy
_ ¡Oh!, dice.
_ ¿Tienes hambre? Le pregunto para cambiar
el tema. No quiero hablar de
muerte con Anastasia. No es un tema, que quiero asociar con ella. No te comiste todo el desayuno, le digo
mirándola con desaprobación.
_ Sí, ella responde.
_ Entonces comemos primero.
Me voy directo hacia la costa norte por el
viaducto Alaska Way. El clima está increíblemente hermoso, con mi
increíblemente hermosa novia. Habiendo terminado la tarea, vamos a comer para
llevarla a conocer mi otro pasatiempo favorito. Cuando otra canción de Eva Cassidy
comienza doy vuelta a la izquierda, hacia la carretera de la costa, y por
último llego al estacionamiento del restaurante.
_ Vamos a comer aquí. Espera te abriré la puerta, le digo con
firmeza para que no se baje sola. Quiero
tratarla, como la mujer elegante que es. Quiero
que se acostumbre a ser tratada como una dama.
Caminamos de la mano hacia la zona del
muelle.
_ Cuántos barcos, murmura Anastasia. El mar está en calma, y ella los
observa mientras se balancean sobre el agua. De pronto una ráfaga de viento se
nos precipita y ella abraza con fuerza su chaqueta.
_ ¿Tienes frío? Le pregunto acercándola
más a mi cuerpo para mantenerla caliente.
_ No, simplemente admirando la vista,
responde ella.
_ Yo me pasaría todo el día
contemplándola. Vamos, por aquí.
Finalmente entramos a un bar inmenso frente al mar.
Dante me reconoce y me saluda
inmediatamente.
_ ¡Señor Grey!
¿Qué puedo ofrecerle hoy?
_ Dante, buenas días, sonrío y nos
sentamos en los taburetes del bar. La
hermosa dama es Anastasia Steele.
_ Bienvenida al local de SP, dice
sonriendo.
_ ¿Qué le gustaría beber? Ana se voltea y
me mira.
_ Por favor, llámame Ana y voy a tomar lo mismo
que Christian, dice con una sonrisa tímida.
_ Yo voy a tomar una cerveza. Este es el único bar de Seattle donde
se puede obtener una Adnam Explorer, le digo.
_ ¿Una cerveza?
_ Sí, le respondí sonriendo. Dos cervezas por favor, Dante. Asiente
e inmediatamente nos trae dos botellas de cerveza y las pone delante de
nosotros.
_ Ellos hacen una deliciosa sopa de
mariscos aquí, le informo. Realmente
me gustaría que la probara. Pero
yo no quiero decírselo. Quiero
que sea su propia elección.
_ Sopa de mariscos y cerveza suena bien, sonríe.
_ ¿Dos sopas? Dante me pregunta.
_ Por favor, le contesto sonriendo.
Dante nos sirve nuestras sopas y están muy
buenas y por primera vez en mi vida me abro a alguien de buena gana. Empezamos
a conversar sobre cómo comencé mi empresa. Lo que me inspiró. Hablo de mi
fijación de sacar a flote las empresas con problemas, del desarrollo de nuevas
tecnologías y otras cosas. Pero también quiero conocer a mi novia mejor.
_ ¿Cómo es Ray? Le pregunto, y ella comienza
a hablar de Ray y su infancia. Le
pregunto por qué a pesar de ser un buen padre, su madre le abandonó. Ella suspira y habla de la
incompatibilidad de él y su madre. Me cuenta de cómo le gustaban los frondosos
bosques de Montesano. Habla sobre el divorcio de sus padres, y su traslado a
Texas y Las Vegas. Estoy agradecido de que ella no se quedara en esos estados. Ella me bombardea con preguntas acerca
de mis películas favoritas, libros y por supuesto ya conoce mi gusto por la
música. Cuanto más hablamos, más
me sorprende descubrir que tenemos gustos parecidos. Tenemos mucha empatía.
Ha pasado el tiempo muy rápido y ya son
casi las 2:00pm. Pago la cuenta y nos alejamos del restaurante.
_ Es un buen sitio. Gracias por el almuerzo, dice.
_ Volveremos. Quiero mostrarte algo, le
digo emocionado.
_ Lo sé... y estoy impaciente por verlo sea
lo que sea, responde ella.
Mientras caminamos a lo largo del muelle,
vemos disfrutando de su día libre a las familias. La llevo hasta estar al
frente de mi catamarán. Es grande,
por supuesto.
_ Creí que podríamos salir a navegar
esta tarde.
Sailing - Rod Stewart
Este
barco es mío, le digo y de alguna manera me siento tímido al respecto. Nunca he
traído a nadie aquí, excepto por supuesto a mi familia. Es un barco muy
elegante.
_ ¡Guau! Es todo lo que pudo decir
impresionada.
_ Construido por mi empresa, lo digo con
orgullo. En cierto modo, es mi
bebé. Diseñado hasta el último detalle por lo mejores arquitectos navales del
mundo y construido aquí en Seattle en mi astillero. Dispone de sistema de
pilotaje eléctrico híbrido, orzas asimétricas, una vela cuadra en el mástil… Empiezo
explicando como un padre excesivamente entusiasta que habla de los logros de su
pequeño.
_ Está bien... ya me has perdido,
Christian, Anastasia dice incapaz de entender toda la información que le estoy
dando, solo me hace sonreír. Es un barco magnífico, termino por decir.
_ Parece realmente fabuloso señor Grey.
_ Lo es señorita Steele.
_ ¿Cómo se llama?
Tomo su mano, y la llevo a un lado del
catamarán. En letras grandes dice Grace.
_ ¿Le pusiste el nombre de tu madre?
Pregunta sorprendida.
_ Sí, le respondí ¿Por qué te parece
extraño? Ella simplemente se encoge de hombros con sorpresa. Tal vez es por mi comportamiento
rígido alrededor de mi madre. Nunca
he sido bueno para mostrar emociones. Es
un concepto muy nuevo para mí, pero yo amo a mi madre.
_ Yo adoro a mi madre, Anastasia. ¿Por qué no le iba a poner su nombre
al barco?
_ No, no es eso... es solo... Ella suspira
tratando de reformular sus pensamientos.
_ Anastasia, Grace Trevelyan me salvó la
vida. Le debo todo. De hecho, yo
no estaría parado frente a Anastasia si no hubiera sido por mi madre. Ella es mi salvadora. Anastasia finalmente toma como bueno
mi comportamiento y se da cuenta de la reverencia que tengo hacia mi madre.
_ ¿Quieres subir a bordo? Pregunto con
entusiasmo.
_ Sí, por favor, dice con los ojos
iluminados por la emoción.
La tomo de la mano y caminamos por la
pasarela y finalmente estamos a bordo de mi barco. Anastasia observa los
alrededores. Mira a través de las puertas correderas hacia la cabina, y pega un
respingo por algo. Mac, abre la puerta y sale de la cabina.
_ Mac, le digo radiante. Mac es una de las pocas personas que considero
lo más cercano a un amigo, con la excepción del Dr. Flynn por supuesto.
_ ¡Señor Grey! Bienvenido de nuevo, dice
dándome la mano.
_ Anastasia, este es Liam McConnell. Liam, mi novia, Anastasia Steele, hago
las presentaciones normales.
Nombrar a Anastasia como mi novia me da un
calor en el corazón. Ambos todavía estamos acostumbrándonos a la idea, pero sé
que la quiero mucho y más.
_ ¿Cómo está usted? Dice Liam y estrecha la mano de Anastasia.
_ Bienvenida a bordo señorita Steele,
llámeme Mac.
_ Ana, por favor, le corrige,
sonrojándose.
_ ¿Qué tal se está portando Mac? Le
pregunto acerca de mi barco.
_ Está preparada para el baile señor, dice
sonriendo.
_ En marcha pues, dice Christian.
_ ¿Van a salir? Pregunta Mac.
_ Sí. Respondo a Mac. ¿Una vuelta rápida Anastasia?
_ Sí, por favor, responde.
Llevo a Anastasia dentro de la cabina. Ella observa todo y sus ojos se van
hacia la ventana que da hacia la marina, suspira mientras mira por encima de la
vista panorámica.
_ Este es el salón principal, le digo.
Tomo la mano de mi novia y la conduzco a
través de la cabina principal. Ella
mira los pisos de madera clara, el ambiente moderno y bien iluminado, todo
limpio, funcional y espacioso.
_ Los baños están de este lado y le apunto
a dos puertas, y luego abro la puerta frente a nosotros y entramos en la
habitación. La habitación tiene
una cama de matrimonio grande y la decoración es de lino azul pálido y madera
clara.
_ Esta es la habitación principal, dije
mirándola después de cerrar la puerta. Tú
eres la primera chica que traigo aquí, aparte de mi familia. Sonrío. Pero ellos
no cuentan.
Ella se voltea y me mira apasionadamente.
Sus labios se abren para aspirar el aire y dar cabida a la emoción que hay en
ella. Yo la traigo a mis brazos enredando mis dedos en su cabello, la beso
largo y persistente. Ella me devuelve el beso con la misma pasión, tirando de
mi pelo, pasando sus manos por mis oídos, acariciando distraídamente mis
lóbulos de las orejas y volviendo a mi pelo otra vez. En el momento que nos separamos, los dos
estamos sin aliento y deseosos.
_ Tenemos que bautizar esta cama, le murmuro
junto a su boca.
_ Pero no en este momento. Vamos que Mac está soltando amarras,
le digo mientras la llevo y apunto a otra puerta, mi oficina está allí y en el
frente aquí hay dos camarotes más.
_ Entonces, ¿cuántos puede dormir a bordo?
Pregunta.
_ Es un catamarán con seis camarotes,
aunque solo he subido a bordo a mi familia. Me gusta navegar solo. Pero no
cuando tú estás aquí. Tengo que mantenerte vigilada.
Abro uno de los cajones y agarro un chaleco
salvavidas de color rojo brillante. Una
idea me viene a la cabeza. Anastasia solo vestida con un chaleco salvavidas.
¡Esto se pone caliente!
_ Toma, le digo mientras la ayudo a
ponerse el salvavidas por encima de su cabeza y aprieto las correas. Sonrío
nada más de imaginarla solo con esto y nada debajo. En otro momento quizás...
¡Maldita sea!
_ Te encanta atarme ¿verdad?
_ De todas las formas posibles, le digo
con malicia. ¿Qué puedo decir? No
puedo evitarlo. Soy un hombre muy
viril y tengo una mujer muy caliente. Si
hay algo sensual y excitante en tu mujer, y la puedes tener de todas las
maneras y ella te da confianza con su cuerpo… eso es increíblemente caliente.
_ Tú eres un pervertido, ella se
burla de mí.
_ Lo sé, dije alzando las cejas y
sonriendo.
_ Mí pervertido, susurra dulcemente.
_ Sí, tuyo, digo finalmente cuando termino
de atarla. Siempre. La atraigo hacia mí y beso a mí mujer. Hago una nota mental
de que debo realizar esta escena. Es demasiado sexy como para dejarla ir.
_ Ven.
La llevo a la cubierta superior, en la
pequeña cabina. Mac está trabajando las cuerdas en la proa de la embarcación.
_ ¿Es aquí donde aprendiste todos los
trucos con la cuerda? Anastasia me pregunta inocentemente.
_ Los ballestrinques me han venido muy
bien, le digo para evaluar su expresión. ¿Ella
quiere estar atada? Señorita
Steele, he despertado tu curiosidad. Me
gusta verte así curiosa. Yo estaría más que feliz de demostrarte lo que puedo
hacer con una cuerda. Sonrío hacia ella. Su
expresión cambia a una de impasible. ¡Oh,
mierda! ¡Estoy loco! ¿Qué hago?
_ Has picado, dice sonriendo.
Oh, cariño, no me lances esa mierda sobre
mí, que me asusta casi hasta la muerte. Tengo que ver lo que puedo hacer para
rectificar esa situación. Esto
puede ser divertido.
_ Voy a tratar contigo más tarde, pero
ahora mismo tengo que pilotar un barco.
Me siento en los mandos y aprieto el motor
de encendido que se pone en marcha con un rugido.
Mac el experto salta a un lado y comienza
a desatar una de las cuerdas y se mueve a otra tarea. Anastasia me mira cuando con facilidad saco a
Grase del puerto. La gente está
viendo nuestra partida, ya que es uno de los mejores barcos del muelle.
Anastasia le devuelve el saludo a los niños que la despiden con una sonrisa en
su rostro. La atraigo hacia mí, la meto entre mis piernas y le muestro
los controles.
_ Toma el timón.
_ Sí, sí, capitán, ella contesta riéndose.
Pongo mis manos sobre las de ella y nos dirigimos
rumbo fuera de la marina hacia las aguas de Puget Sound. Cuando salimos del
puerto deportivo, podemos sentir el viento, y navegamos sobre un mar encrespado
y rizado.
_ Tiempo de navegar, le digo y sonriendo
le entrego a Anastasia el timón. Toma
cógelo tú, y ella está absolutamente horrorizada ante la perspectiva. Traga
saliva con los ojos muy abiertos incapaz de hilar una frase.
_ Es muy fácil nena, toma el timón y no
dejes de mirar por la proa hacia el horizonte. Lo harás muy bien como siempre.
Cuando se icen las velas, notarás que el timón se tensa. Limítate a mantenerlo
firme. Yo te haré esta señal, hago un movimiento con mi mano en mi cuello, y
entonces puedes parar el motor. En este botón de aquí, le señalo el interruptor
negro. ¿Entendido?
Su pecho sube y baja rápidamente.
_ Sí, me dice mientras asiente
frenéticamente.
La beso rápidamente y la dejo en la silla del
capitán. Estoy muy emocionado por traer a Anastasia aquí. Me uno a Mac para desplegar las velas. Desatamos cuerdas y manipulamos
cabrestantes y poleas. Mac y yo hemos hecho esto muchas veces antes, así que no
tengo que decir mucho para saber quién tiene que hacer qué.
Finalmente conseguimos izar la vela mayor
que se infla y se hincha a merced del viento y de pronto el barco se acelera.
_ ¡Mantén el equilibrio nena y apaga el
motor! Le grito y ella lo hace asintiendo con entusiasmo mientras me mira.
Ahora estamos navegando hacia la Península
Olímpica, deslizándonos con el aire.
_ ¡Mac!
_ Sí, señor Grey, responde.
_ Dame un par de horas con mi novia una
vez que anclemos en tierra, quiero que bajes.
_ Sí, señor, dice sonriendo. Asiento con
la cabeza y camino de vuelta a la sala de control.
_ ¿Qué te parece? Le grito a Anastasia por
encima del sonido del viento y el mar.
_ ¡Christian esto es fantástico! Exclama como un
niño que acaba de descubrir su juguete favorito.
_ Ya verás cuando ice la vela globo. Le
hago un gesto a Mac para que la despliegue. Es de un oscuro rojo intenso. Uno de mis colores preferidos. El color de la pasión.
_ Interesante color, grita Anastasia, ella
me entiende perfectamente. Sonrío
como un depredador por supuesto y le doy un guiño. Ahora, ella lo sabe también.
La vela globo se hincha y hace que el
barco coja mayor velocidad, Anastasia la mira con curiosidad.
_ Velaje asimétrico. Para mayor velocidad, le explico.
_ Es increíble, dice maravillada.
Anastasia tiene una enorme sonrisa en su
cara, y mientras nos dirigimos hacia las montañas olímpicas y a la Isla Bainbridge,
la ciudad de Seattle queda más pequeña detrás de nosotros. Todo es simplemente
hermoso aquí afuera. Verde,
árboles altos de hoja perenne, es hermoso este lugar. Mares azules y cielos claros con mi mujer a mi lado esto
es como tener un pedazo de cielo.
Patch of Heaven - KD Lang
_ ¿A qué velocidad vamos?
_ A quince nudos.
_ No tengo ni idea de lo que eso
significa.
_ Unos veintiocho kilómetros por hora, le
explico.
_ ¿Eso es todo? Se siente mucho más rápido. Le aprieto
mi mano con la mía. Ella está simplemente hermosa. Me quita el aliento, toda
burlona, aprendiendo, experimentando y completamente curiosa.
_ Estás preciosa Anastasia. Es agradable ver tus mejillas con un
poco de color… y no porque te ruborices. Tienes el mismo aspecto que en las
fotos de José. Ella se da la vuelta y me
besa.
_ Sabes cómo hacer pasar un buen rato a
una chica señor Grey.
_ Nuestro objetivo es complacer, señorita
Steele, respondo cuando aparto su cabello de la espalda y le doy un beso en la
nuca, calentándola para lo que vendrá después.
_ Me gusta verte feliz, le digo. Sostengo a
Anastasia en mis brazos mientras navegamos, y ella pone su cabeza en mi pecho.
Esta es la calma después de todas las tormentas que hemos estado experimentando
últimamente. Aunque todavía estamos en
el ojo de la tormenta ya que aun no aparece Leila. Pero en este momento en esta
burbuja que hemos creado aquí todo es tranquilo y pacífico.
*****
Alrededor de una hora más tarde, estamos
anclados en la isla de Bainbridge, uno de mis lugares favoritos para navegar. Mac baja a la costa como le indiqué
antes, y esa es mi señal. Agarro
la mano de Anastasia y prácticamente la arrastro a mi camarote ya que no quiero
perder un solo minuto sin estar con ella.
Me presento ante Anastasia, como un hombre
con un propósito, completamente enamorado de ella y embriagado por su belleza. Desato
rápidamente su chaleco salvavidas y lo tiro a un lado. Quiero mi postre y mi objetivo es
reclamarlo. Miro a mi mujer
fijamente con ojos desvergonzados, deseosos y oscuros.
Levanto la mano y deslizo mis dedos por su
barbilla, a lo largo del cuello, sobre el esternón hasta alcanzar el primer
botón de su blusa. Ella respira
rápidamente.
_ Quiero verte, le digo cuando le
desabrocho el primer botón. Ella abre los labios para jadear, su cara me dice
que está deseosa y lista para saltar sobre mí. Me inclino y beso sus labios
entreabiertos. Me gusta su
visión ardiente por mí.
_ Desnúdate para mí, le susurro, con los
ojos ardientes.
Sin romper su mirada con la mía, poco a
poco y sin prisa abre un botón. Mis
ojos están en llamas, sólo reflejan lo que hay en mi alma. Ella se mueve al siguiente botón y
luego al otro y finalmente tiene su camisa abierta. Con un ligero movimiento de hombros, la
deja caer al suelo. Ahora mueve sus
dedos para deshacer sus pantalones
vaqueros.
_ Espera, le ordeno. Siéntate.
Se sienta en el borde de la cama, y yo me
pongo de rodillas, para deshacer los cordones de sus zapatos. Tiro de cada zapato, seguido por sus
calcetines. Tomo su pie izquierdo y lo
elevo a la altura de mi boca y le planto un beso en la yema del dedo gordo y
luego le doy un pequeño mordisco arrastrando mis dientes.
_ ¡Ah! Ella gime al sentir el tirón en la
ingle. Sonrío y me levanto, levantándola
de nuevo.
_ Continúa, le digo.
Ella baja la cremallera de sus pantalones
y engancha los pulgares en la cintura de sus pantalones y los desliza por sus
piernas. ¡Baby, eres dulce! Esto es un espectáculo para mí. Trato de ocultar mi placer, pero mi
sonrisa me delata, el deseo no deja mis ojos. A
medida que sale de sus pantalones, ella revela su tanga blanca de encaje y su
sujetador a juego que hacen que sus pechos se vean hermosos y redondos. ¡Tan
jodidamente sexy! Sin romper la
mirada, ella hace un movimiento y va a su espalda para desabrochar el sujetador
y lo desliza por sus hombros hasta dejarlo al lado de su camisa. Engancha sus pulgares en sus bragas y con una
facilidad experta, las desliza hasta los tobillos y sale de ellas.
¡Oh Dios! ¡Ella es una diosa sexy! ¡Estoy enamorado de esta mujer! ¿Qué bien he hecho para merecer esto? Tengo que hacer el amor con ella. Tengo que tenerla, abrazarla, y
reclamarla de nuevo para mí, quiero tomarla en cada superficie que poseo.
Me agacho y saco mi suéter, luego mi camiseta
sin perder la mirada de Anastasia. Me quito rápidamente los zapatos y los
calcetines y luego me agacho para abrir la bragueta, pero Anastasia llega a
más.
_ Déjame.
You Were Meant For Me - Jewel
Exhalo un suspiro para preservar la calma
sin saltar sobre ella.
_ Adelante, le digo sonriendo.
Da un paso hacia mí y desliza sus dedos
dentro de la pretina de mis jeans y me jala hacia ella, haciéndome jadear por
la iniciativa que ha tomado, ahora estoy un paso más cerca de ella. Sonrío. Deshace el botón superior, y sin
descomprimir mis pantalones, pasa sus dedos sobre mi erección considerable.
Doblo mis caderas hacia su mano con ansiedad y cierro los ojos perdiéndome en
el éxtasis de este sentimiento.
_ Te estás poniendo más audaz Ana, más
valiente, le susurro, y me inclino para besarla profundamente, mientras ella
dice rozando sus dedos justo encima de la parte superior de mis jeans.
_ También tú, susurra. Y sí, me estoy
poniendo más valiente, también. Sólo
por causa de ella.
_ Allá voy, me susurra.
Ella mueve su mano al frente de mis
pantalones vaqueros y baja la cremallera, sus manos avanzan por mi camino feliz
y mete la mano por mis boxers hasta sujetar mi miembro con fuerza.
Un sonido bajo y gutural de placer sale de
mi boca. Estamos tan cerca. Yo la agarro entre mis brazos y la
beso de nuevo, pero con lentitud, completamente enamorado. Le expreso en mi beso lo que no soy capaz de
decir con palabras. Ella me anima, mueve su mano lentamente arriba y abajo por
toda mi longitud y el placer que experimento es indescriptible. Yo pasos mis
brazos como serpientes alrededor de ella, una mano la dejo en su espalda y la
otra la llevo a enredarla en su pelo.
_ Oh, te deseo tanto cariño...
Have I told You Lately - Rod Stewart
Es
todo lo que puedo soportar sin hacer el amor con ella. Inmediatamente me alejo y me quito mis
pantalones vaqueros y los boxers y ahora ambos estamos desnudos, sin ocultar
nada. La mirada de Anastasia cambia a una de tristeza.
_ ¿Qué pasa, Ana? Le pregunto, acariciando
su mejilla con los nudillos.
_ Nada. Simplemente
ámame ahora.
Con su declaración, tomo a Anastasia en
mis brazos y la beso con mis manos en su pelo. Nuestros labios se fusionan,
nuestras lenguas bailando su tanto particular, jugueteando. Llevo a mi mujer
hasta la cama y bajándola suavemente me acuesto a su lado. Mi nariz pasa a todo
lo largo de su mandíbula, inhalando su aroma único, embriagador, que me
despierta. Estoy completamente excitado.
_ ¿Tienes alguna idea de lo exquisito que
hueles Ana? Eres irresistible.
Ella sólo me mira con asombro y reverencia
absoluta, enamorada, inocente. ¿Cómo puedo resistirme a esta poción? Arrastro mi nariz por su garganta,
sobre sus pechos y los beso, quiero mantener este aroma en mi memoria.
_ Eres tan hermosa, murmuro mientras tomo
un pezón y lo chupo suavemente. Su espalda se despega de la cama y deja escapar
un gemido involuntario.
_ Quiero oírte nena, le digo.
Mis manos se arrastran hacia su cuerpo
mientras mi boca persiste en sus pechos, con mis labios los chupo y los muerdo
deliciosamente. Ella es simplemente deliciosa, yo nunca voy a tener suficiente
de ella. Mis manos siguen su camino hasta la cintura, hacia sus curvas deliciosas,
pasando por sus nalgas, sin dejar de lamer y chupar sus pechos. Su cuerpo está
en tensión, excitada, deseosa y tengo que estar dentro de ella.
Llego hasta su rodilla y la tomo para
engancharla alrededor de mi cadera, desnudando su sexo en flor para mí. Ella da
un jadeo carnal de deseo puro y su reacción aumenta mi deseo por ella diez
veces más haciéndome sonreír en su piel. Ruedo
rápidamente sobre la cama y me doy la vuelta, de manera que ella queda a
horcajadas sobre mí y le doy un condón.
Anastasia se mueve hacia atrás para
acomodar mi longitud sustancial tomando mi hombría en sus manos con fuerza. Para mi sorpresa, ella se agacha y
besa mi pene llevándoselo a la boca. Pasa
su lengua con movimientos giratorios en la punta y lo chupa con fuerza. ¡Cristo
su boca golosa! No puedo dejar de quejarme y flexiono mis caderas
involuntariamente para entrar completo hasta llegar a su garganta. Entra y sale
varias veces y luego me aprieta con sus labios hasta salir lentamente
chupándome. ¡Simplemente es exquisito!
Finalmente se sienta y me mira. Esta mujer sin ninguna ayuda puede
arrastrarme con ella, me tortura con su mirada y me trae al borde del éxtasis
con sus caricias. Estoy asombrado
y sin aliento.
Ella rompe el paquete y lo envaina a lo
todo lo largo. Le doy mi mano para invitarla a montarse encima de mí y ella
desciende lentamente sobre mi hombría. Es simplemente glorioso cuando entro en
su húmeda cavidad. Siento sus músculos que aprietan alrededor de mí y las
sensaciones se propagan por todo mi cuerpo haciéndome gemir con un sonido
profundo que sale de mi garganta. Pongo
mis manos alrededor de sus caderas y entro y salgo de ella con ímpetu, necesito
consumirla.
_ Oh, cariño, le susurro, y de repente me siento
para quedar cara a cara con mi mujer y entrar lo más profundo que me sea
posible. En esta posición se siente divina, estamos encajados perfectos, se
siente una mejor fricción y me entierro en ella lo más profundo que puedo. La
sensación es simplemente placentera. Ella
respira jadeando y se aferra a mis brazos para movernos mejor. Le agarro la
cabeza entre las manos y la miro sintiendo cada movimiento, cada deseo, cada
parpadeo, mis ojos son el reflejo de ella.
_ Oh, Ana. Lo que me haces sentir, susurro y la
beso con toda la intensidad ardiente. Ella me devuelve el beso, estamos
conectados en cada punto posible, haciendo el amor, sintiéndonos unidos en
cuerpo y alma. Estoy enterrado profundamente en ella, besándola, sosteniéndola
mientras ella se mueve hacia arriba y hacia abajo sobre mí. Estamos tan cerca, que siento que puedo
tocar su alma.
_ Oh, te amo, me dice entre cada
movimiento. Me quejo y gimo con el sentimiento de indignidad, un sentimiento que
me tortura.
I Would Do Anything For Love - Meatloaf
No me siento digno de ella. Pero
yo quiero ser digno de ella. De
mi mujer. Tengo que ser el que la reclame ahora, y
con un movimiento rápido, me doy la vuelta y la llevo debajo de mí sin romper el
contacto entre nosotros. Ella
envuelve sus piernas alrededor de mis caderas permitiendo que me quede en su
interior. La adoro y la quiero y la
deseo muchísimo. El sentimiento
es tan palpable y tan fuerte que todo lo consume, me pongo en movimiento y dejo
que los sentimientos se apoderen de mí cuando cierro los ojos. El placer que sentimos es tan fuerte que es
imposible no gemir entre nosotros.
Mi barco se balancea suavemente en el
agua, casi imitando mis movimientos dentro de su sexo a la perfección. No hay ningún otro sonido que no sea
nuestra respiración apasionada y yo quiero saborear lentamente este momento, la
primera vez en mi barco. Quiero tenerla a un ritmo pausado, amarla como se
merece. Pongo mis brazos por debajo de su cabeza, acariciando su rostro,
admirando su belleza quemándome en nuestro hacer el amor y la beso.
En este momento, somos uno; cuerpo y alma. Dos mitades que finalmente se encontraron
uno al otro. Estamos saboreándonos, entrando y saliendo con delicia. Las manos de Anastasia se mueven por mi pelo,
tirando de mí hacia ella, exigente, con ganas de más de mí, tratando de
consumirme. Sus manos se mueven a
la parte baja de mi espalda en círculos pequeños. Su respiración comienza a acelerarse
rápidamente cuando mi ritmo la trae al borde de los picos de placer. Mis labios se mueven en su boca
ferozmente, los chupos, los beso, paso mi barbilla por su mandíbula y mordisqueo el lóbulo de su oreja. Quiero
estar en todos los lugares a la vez. Mi respiración se incremente a medida que el
placer aumenta dentro de mí. Los dos empezamos temblando, allí mismo, así… así…
la magia está apareciendo. Ella empuja sus caderas en sincronización con las
mías, incrementando nuestros sentimientos, subiendo… subiendo… siento todos los
músculos de su interior apretando cuando su orgasmo es inminente.
_ Eso es, nena... entrégate a mí... Por
favor... Ana, le murmuro.
_ Christian… grita mi nombre en una
oración como una letanía en sus labios y yo gimo con fuerza cuando alcanzo el
éxtasis total. En este momento, soy de mi amada y mi amada es mía.
3 comments:
Wawwwwwww eso fue glorioso, poder leer ese sentimiento tan fuerte de cristian es algo deslumbrante, el sentir de el que no es solo pasión, es ternura, cariño, admiración y un amor demasiado grande es increíble, cada ves que leo esta novela quedo prácticamente babeando, emine eres un prodigio mil gracias por existir, y tu mi amiga del alma Patricia tu trabajo excelente te admiro y te quiero mucho madre eres genial un besote muahh y gracias.
Excelente...la verdad dos insaciables cuya química los unió para escribir una historia de amor única....Gracias chicas por compartir tan bello trabajo...
Me encanria seguir leyendo desde la perspectiva de Grey, espero con ansias el tercer libro en español.
Felictaciones por este gran trabajo.
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