Wednesday, February 4, 2015

Libro III - Capítulo XI: CINCUENTA SOMBRAS DE GREY - CHRISTIAN Y ANASTASIA

CAPITULO XI

Hay dos lugares en el mundo donde se puede ser feliz: tu hogar y París.

 Traducido y editado por: Patricia Pinto



_ Bienvenidos al Hotel de Crillon, Señor y Señora Grey. Mis felicitaciones a ambos.  El Conserje del Hotel nos recibe y nos saluda en francés y en inglés.


_ Merci beaucoup, respondo.


_ Gracias, Ana contesta, y el conserje un anciano ligeramente calvo, nos sonríe con un nivel profesional.

_ Mi nombre es Durrant Rodell. Estamos encantados de ayudarles y satisfacer sus peticiones. Una simple llamada telefónica, es suficiente para que cualquiera de nosotros pueda atenderlos en el momento que deseen. Ya sea para ir al teatro, a los conciertos, cualquier tipo de transporte, un intérprete en francés si así lo desean, un guía, un chófer, entrenador personal, cualquier cosa que necesiten.  Como conserjes del Hotel Crillon, vamos a hacer todo lo posible para lograr que puedan disfrutar lo mejor de París.
  



_ Ella es nuestra directora a cargo del hotel, la señorita Elisabeth Dubois. Los acompañará a su suite, dice indicando a una joven mujer que está con su uniforme muy ajustado.  Al verme parpadea un par de veces y a continuación extiende su mano para presentarse.

_ Un placer conocerlo señor, señora Grey, dice ella, y Anastasia entrecierra sus ojos apretando ligeramente su mandíbula. Ella extiende su mano primero que yo.

_ Soy la señora Grey, dice y luego me señala a mí, y este es mi esposo el Sr. Grey.

_ Un placer conocerla, responde la señorita Dubois y nos lleva a nuestra suite. Los tacones de Anastasia y de la gerente resuenan en los cuadrados pisos de mármol italiano.


_ Monsieur y Madame Grey, les doy la bienvenida a la Suite Bernstein, dice ella abriendo la puerta para dejarnos entrar.
  


_ Esta suite lleva el nombre de un famoso compositor que le gustaba estar aquí. Como puede ver, las sublimes terrazas ofrecen una vista excepcional de París y de la Torre Eiffel. Espero que tengan una estancia agradable en  el Hotel de Crillon.  Si hay algo que podamos hacer por ustedes, por favor háganoslo saber, dice y sale de la habitación, después de que su mirada se detiene en mí por un par de segundos más de lo debido. Anastasia se encuentra en medio de la sala de estar y mira a su alrededor con curiosidad. Las paredes están cubiertas con paneles de caoba adornadas y tienen pinturas clásicas que muestran la nobleza francesa. La decoración es de color rojo y los colores suaves del oro, y una gran mesa de mármol está ocupando el centro de la habitación. Hay rosas de color rosa pálido distribuidas estratégicamente alrededor de todo el dormitorio.

_ Hay un piano, dice señalando al piano de madera que hace juego perfectamente con el refinado, elegante y romántico ambiente de la suite. 

_ Sí lo hay señora Grey, le respondo con ojos oscuros. Me pregunto cómo será nuestro cuarto. Vamos, digo tomando su mano.




La habitación es bastante grande, de unos 130 metros cuadrados. Pero, todo el conjunto es de más de 700 metros cuadrados como el folleto lo indicaba. La decoración en rojo y oro continúa en el cuarto. Es una mezcla clásica del siglo XVII y XVIII francés.  El sol se está ocultando afuera y en la noche las luces de la ciudad se están filtrando lentamente a través de la puerta de la terraza. Los ojos de Anastasia se ensanchan cuando ve a la terraza. Rápidamente va camino entre las dos puertas francesas y las abre. La ciudad vislumbra la luz. La Torre Eiffel está iluminada y brilla en toda su gloria. La forma en que la torre está cálidamente iluminada y el metal oscuro contra el negro de la noche hace que sea un espectáculo innegablemente elegante. Miles de luces blancas brillantes están danzando por toda la torre, creando una escena mágica, adornando la ciudad del amor y de la luz majestuosamente.



_ ¡Este hotel... Es como un castillo Christian! Susurra en voz baja. Miro a mi esposa sin pestañear. 

_ ¿Te gusta?

_ ¿Qué si me gusta? ¡Me encanta! ¡Es hermoso! ¿Hay alguna razón en particular por la que elegiste este hotel? Pregunta toda emocionada.

_ En realidad, sí. El hotel fue construido por el rey Luis XV en 1758 como un palacio, y, por supuesto, que se construyó con la grandeza de la arquitectura del siglo XVIII. Creo que un duque vivía aquí. Luego otros nobles residieron en el palacio hasta la Revolución francesa. De hecho, el tratado franco-americano se firmó aquí en 1778 y fue reconociendo el Acta de Independencia de los Estados Unidos.

_ Entonces, ¿lo elegiste por su importancia histórica? Me pregunta con ojos burlones.

_ Sí y no. Este hotel ha soportado mucha agitación en su larga historia. Y mira lo que ha llegado a ser. Le digo haciendo un gesto señalando alrededor. Quiero que resistamos a todo. No importa lo que viviremos a través de nuestro matrimonio, sin importar las dificultades que enfrentemos en la vida, quiero que resistamos a todo lo que nos viene y siempre estemos juntos, le susurro. Sus labios se curvan en una mitad de sonrisa y mitad de tristeza.
_ Christian dices las cosas más románticas que me dejas sin aliento, susurra. Y te amo por eso. Te amo por como eres y te amo por amarme. Dice con los ojos llorosos y serpentea sus brazos alrededor de mi cuello.
_ Flores y corazones para ti Anastasia, le contesto.
_ Dame un beso… susurra mientras sus labios encuentran los míos. Ella no tiene que pedirlo dos veces. Nuestros labios se moldean cuando estamos consumidos por la pasión en la ciudad de las luces y el amor. Sus manos viajan por mi cabeza y sus dedos se enredan en mi pelo tirando con dulzura. Su lengua se abre camino entre mi boca con fuerza haciéndome jadear y yo la chupo con el mismo fervor. Finalmente empujo la mía en su boca y ella gime mientras la acaricia con pasión. Engancha su pierna derecha por la cintura tratando de subirse.

La Vie En Rose - Louis Armstrong

_ ¡Ana, más despacio! ¡Me estás intimidando nena! Me quejo en su boca.

_ ¡Por favor! Ella me pide.
 _ Tenemos una reserva para la cena, pronto.

_ Por favor... no me importa la cena, estamos en la ciudad de los enamorados… insiste mendingando en mi boca.
 _ ¿Quieres hacerlo aquí? ¿En la terraza?  Pregunto incrédulo.

_ Por favor. No me hagas rogar, Christian… Porque yo... me trajiste al lugar más romántico de la tierra. ¡Quiero hacer el amor con mi marido!  Dice ella mordiendo mi labio inferior y lo chupa para calmar el leve pinchazo. Mi aliento sale silbando entre los dientes.
_ ¡A la mierda los planes para la cena! ¿Qué quieres Anastasia? Le pregunto con los ojos oscuros.
_ Quiero que hagas lo que sea para tenerte… dice devolviéndome mis propias palabras.
_ ¿Para tenerme? Lo consideraré nena, le contesto. Vamos a utilizar este banco, le digo señalando uno que tiene cojines color crema. El sol se ha ocultado por completo y las luces de la ciudad están brillando a la distancia. La terraza se encuentra en relativa oscuridad.

_ Ven, y la tomo de la mano.   Me siento en el banco y la pongo en mi regazo a horcajadas. Mi mano derecha sube por su pierna e inmediatamente coloco la palma en su sexo sobre sus bragas de encaje. Ella mueve sus caderas, empujando su sexo en mi palma, y arquea la espalda. Mi erección ya se está forzando en mis pantalones y ella se mueve tratando de llegar a mi polla para frotarse. Inserto mi dedo en el encaje de sus bragas y lo rasgo liberando su sexo. Ella está deliciosamente húmeda. Su falda está arriba justo donde comienzan sus muslos y la visión de ella en mi regazo es intoxicante. Muevo mi mano izquierda para deshacer los botones de su blusa y empujo cada pecho por sobre la copa de su sujetador, sus pezones se ponen rígidos con la ligera brisa de la tarde.  Ella echa la cabeza hacia atrás y su largo cabello cae en ondas sobre su espalda casi desnuda. 
Anastasia tiembla en mi regazo. Mis dedos patinan sobre su pecho, son una tentación. Un escalofrío le recorre la espalda de nuevo y ella gira sus caderas en mi regazo, rogando por un poco de fricción. Con mi mano izquierda sigo jugando con uno de sus pechos y con mi boca capturo el otro. Cuando hago círculos en su pezón con mi pulgar, mi mano derecha hace lo mismo con su clítoris y  mi lengua juega lentamente con el otro. Ella gime. Sigo rodando su pezón entre el pulgar y el índice y tiro del otro con mis labios. Mis ojos están fijos en su rostro. Ella está con los ojos cerrados tratando de absorber toda la sensación.
_ Los ojos abiertos nena… le digo cuando suelto brevemente su pezón de mi boca. Quiero verte cuando te corras, murmuro con voz ronca.
_ ¡Marido! Déjame ir por favor… ella me ruega.
_ Todo a su tiempo bebé. Primero quiero llegar a todos tus puntos y cuando estés lista y suave, llevarte hasta el fondo, le contesto. Mis labios viajan de nuevo a su pecho y chupo su pezón haciendo paradas estratégicas. Luego voy al otro y hago lo mismo. Aprieto su trasero delicioso y hago círculos en sus nalgas. Su pezón derecho  justo está en mis labios y le levanto la falda completamente para acceder a su trasero y aterrizo un par de azotes en su culo, haciéndola curvarse, lo que hace que entre mi dedo más profundo en su sexo. 
_ ¡Christian! ¡Te necesito ahora! Ella ruega más. Descomprimo mis pantalones rápidamente y mi erección salta libre. Levanto sus nalgas de mi regazo, y poco a poco la sitúo por encima de mi polla dolorida y lentamente me entierro hasta el fondo en su sexo codicioso. Mi pene la llena, y ella se extiende al máximo. Ella se hunde más en mí, hasta las bolas y gira sus caderas tratando de no dejar nada por fuera. Luego se levanta y baja de nuevo para acoplarnos en nuestros movimientos. De esta manera estoy dentro de sus profundidades suaves y sedosas.
_ ¡Ahhh! Ella gime y luego sus labios encuentran los míos. Con una mano en sus nalgas la guío en sus movimientos y la otra la tengo en su pecho sobando, nuestros labios están sellados en un beso apasionado.
_ ¡Chúpame! Ella gime en mi boca. ¡Se está convirtiendo en una Madame muy exigente! Sonrío por su hambre de mí. Ella cabalga alto en mi polla, inclina la cabeza hacia atrás mientras mis labios se deslizan por su barbilla y su cuello, después a su pecho, chupando con fuerza, y tiro del otro pezón entre el pulgar y el dedo alargándolo. Ella gira sus caderas y acelera sus movimientos, y su sexo inicia la contratación, apretando deliciosamente dentro, dando dulces masajes a mi pene, siento sus caricias. Cuando chupo nuevamente su pezón ella se viene con fuerza y empuja más su pezón en mi boca y comienza a cabalgar como un potro salvaje gimiendo y es mi perdición sentirla tan desenfrenada galopando con fuerza sobre mí. Me vengo fuertemente dentro de ella y siento pasar las estrellas delante de mis ojos. Finalmente se desploma sobre mí con sus brazos alrededor de mi cuello y yo tiernamente comienzo a besarla.
Cuando la levanto de mis piernas, mis fluidos corren libremente por sus piernas y ella se muerde el labio. El rubor que se extiende por sus mejillas al verla marcada de esta manera y su labio en cautiverio es una combinación muy fuerte para mí. ¡Tiene una cara de inocencia y de diablilla al mismo tiempo que simplemente me encanta! Yo me levanto inmediatamente sin siquiera molestarme en subir mi cremallera y la llevo al baño de nuestra suite.

_ Hora del baño, le digo. Y esta vez, quiero disfrutar de mi esposa en la bañera.


****    ****
Mis manos la buscan a ella en la cama. Cuando mi mano alcanza la almohada, su ausencia me despierta inmediatamente. Sólo me siento seguro cuando está en la cama conmigo; sentir la comodidad que sus brazos y piernas me proporcionan es un efecto tranquilizador para mi cuerpo. Salgo inmediatamente de la cama y agarro la sábana para cubrirme.  Ella no está en la sala de estar ni en el comedor.


¿Salió sin decírmelo? Decido salir a la terraza y ahí la encuentro. Envuelta en su bata de baño, encaramada en una silla mirando la ciudad del amor.




Ella está mirando a lo lejos, perdida en las vistas y en los sonidos de la ciudad; que ni siquiera se da cuenta cuando estoy justo detrás de ella.

_ Hola, susurro lentamente para no asustarla. Se da la vuelta y me mira con sus grandes ojos azules.

_ Hola, Christian, dice volviendo la cabeza hacia mí sonriendo; pero la sonrisa no llega a sus ojos. ¿Está preocupada por algo?
_ ¿Qué estás haciendo aquí? Pregunto, sin pestañear. Pero ella me responde con una pregunta.
_ ¿Sabes cuáles son mis diez películas favoritas? Me pregunta mirándome. Niego con la cabeza sin romper nuestra mirada, y le respondo suavemente “No”
_ Una de ellas se llama Sabrina. No la más nueva, sino una con Audrey Hepburn y Humphrey Bogart. ¿Alguna vez la has visto?  Me pregunta con voz distante.
_ No lo creo. ¿De qué se trata?
_ Hay una chica llamada Sabrina Fairchild que vive sobre el garaje de una casa palaciega propiedad de la familia Larrabee en Long Island. Ella está enamorada de David, que es el más joven heredero de los Larrabee y es un playboy. Ella crece viendo sus grandes fiestas y bailes de familia desde el árbol más cercano. Su padre es británico y es el chofer de la familia. Cuando su padre descubre su amor por David, él lo desaprueba porque no son de la misma clase social y él le da un boleto para que se vaya a París a aprender a cocinar como su madre, que había muerto hacía ya mucho tiempo. Ella se va a París por unos años. No aprende a cocinar, pero aprende de la elegancia, sofisticación y encanto que le da el lugar. Cuando regresa a casa, viene cambiada con un corte de pelo elegante y un elegante traje, dándole un aspecto de mujer madura con un estilo muy francés. Ella se ve tan impresionantemente hermosa y David es cautivado por ella.




Su padre le dice a Sabrina:
_ El sigue siendo David Larrabee, y tú todavía eres la hija del chofer. Todavía estás tratando de alcanzar la luna.
A lo que ella responde.
_ No, padre. La luna me está alcanzando para mí.
Anastasia continúa muy metida en su relato.
_ Pero la familia de David ya tiene planes para él, quiere que se case con una chica rica para fundir la riqueza de las familias y David tiene un hermano mayor llamado Linus, graduado en Yale, que está dispuesto a que este enlace se realice. Él también se da cuenta de la criatura radiante en que Sabrina se ha convertido. Pero por supuesto Linus y el padre de la niña rica no van a permitir que Sabrina pueda poner fin a la fusión económica que está a punto de realizarse. Así que Linus decide meterse entre Sabrina y su hermano para sacarla del camino y hacer que el matrimonio se lleve a cabo a toda costa.

_ ¡Qué culo! Respondo. Ella sonríe un poco, y continúa con la historia.

_ Linus manipula a Sabrina. Él se convierte prácticamente en su sombra y comienza a confundirla con sus sentimientos. Por lo que Sabrina ahora no sabe a quien quiere, si a David o a Linus. Entonces él la engaña manipulándola con el amor y la envía de nuevo a París con la promesa de encontrarse con ella. Su objetivo inicial era deshacerse de ella, pero entonces viene un cambio en su corazón. Se da cuenta que su vida es sólo un éxito económico pero que en el fondo está vacío. Se ha enamorado de ella y la necesita y es allí cuando decide ir tras ella a París. El resto es historia, dice ella y se encoge de hombros.

_ Ana, ¿qué te hizo pensar de esa película?

_ ¿No puedes ver? Pregunta. 
_ No, no puedo. ¿Qué se supone que deba entender?
_ Soy Sabrina en cierto modo. Me trajiste a esta ciudad hermosa, a esta opulencia, dice gesticulando alrededor. Bien podría ser la hija de tu chofer. No tengo nada, y sin embargo... me quieres. Tú me amas... ¡Y estoy completamente cautivada contigo y sin poder hacer nada Christian Grey! No sé lo qué sería de mí si no me quisieras. Si no me amaras o si dejaras de quererme, me limitaré a morir, dice ella, con los ojos nublados mirándome.
_ ¡Bebé! Por qué… le digo, pero no tengo oportunidad de terminar la frase. Anastasia se lanza sobre mí y nuestros labios se encuentran. Cuando dejamos el beso, los dos estamos sin aliento.
_ Nada de esto, yo no quiero que digas esas tonterías nunca más. No hay nada más que nosotros ahora. Y no hay nadie más que yo podría desear en este momento que no seas tú. Tú eres y serás la única para mí. ¿No puedes ver eso nena? Esta es nuestra luna de miel. ¿Por qué piensas así? Pregunto.  
_ Sólo por la extravagancia abrumadora, mi increíblemente guapo y amante esposo... me sentí indigna de ti, de pronto. Todavía es como un sueño para mí. Tengo tanto miedo de que voy a despertar y te voy a perder. Te amo tanto que me asusta Christian, dice ella con los ojos llenos de lágrimas y sus pensamientos son reflejos de los míos.



_ Te amo más de lo que puedas imaginar, Ana. Ahora, vamos a desayunar y a salir a explorar la ciudad del amor, le digo abrazándola con más fuerza.



*****    *****
_ ¿Qué vamos a ver primero? Pregunta con entusiasmo mientras vamos en el coche. Estamos en un Mercedes SUV. Taylor está en la parte delantera sentado al lado de uno de nuestros chicos de seguridad francés Philippe. Gaston, es su hermano gemelo y ya está en el sitio que vamos a visitar, haciendo un barrido. Yo sostengo la mano de Anastasia en la mía, y la miro.

Mi respuesta a su pregunta puede ser poco original pero es completamente veraz.

_ La Torre Eiffel.

_ ¿No al Louvre o a los Campos Elíseos, o al Arco de Triunfo o a Notre Dame o al Palacio de Versalles? Pregunta con una sonrisa.

_ Vamos a ver esos también, pero quiero mostrarte lo que me inspiró en la universidad. La torre Eiffel me ayudó a entender el principio de la unidad; porque tiene una combinación magistral de la industria y de la elegancia. Por eso me aseguré de que la elegancia industrial se incorporara en Grey House. La belleza de la línea curva puede equilibrar la rigidez del frío metal. ¡Y, por supuesto, la vista desde la cima es para morirse!

_ ¿Tenemos un guía? Pregunta.

_ Por supuesto, le contesto sonriendo.

_ Pero parece que conoces París muy bien, ¿Por qué el guía?

_ Para poder disfrutar de mi esposa en esta mágica ciudad, le respondo con sinceridad.


Cuando llegamos a la Torre Eiffel, Gaston está esperando con nuestro guía. Es un hombre de unos 50 años, de mediana estatura, de hecho un poco más pequeño que Anastasia. Tiene una actitud cálida y está muy bien uniformado. Sonríe profesionalmente dándonos a los dos la misma atención por igual.

_ Bonjour Monsieur et Madame Grey. ¿Cómo están?  Soy Jaques Painlevé. Seré su guía esta mañana.

_ Gracias, los dos respondemos al mismo tiempo.

_ Permítame presentarles una de las estructuras más reconocibles en el mundo; la Torre Eiffel. Tiene 300 metros de altura y fue terminada a finales del siglo XIX. Fue la estructura más alta del mundo hasta 1930 cuando los estadounidenses construyeron el edificio  Chrysler. Pero curiosamente, ahora es más alta que el Edificio Chrysler por la antena que le colocó la Armada francesa  que mide 24 metros. Así que su altura total es  de 324 metros.  Gustavo Eiffel la construyó para una Exposición Universal en 1889, en conmemoración de la Revolución Francesa de 1789. ¿Ustedes sabían que a pesar de que la Torre es una estructura de acero y que pesa aproximadamente 10 mil toneladas, en realidad tiene una densidad relativamente baja comparada con un cilindro de aire de sus mismas  dimensiones?  Pregunta y mira por encima de sus grandes anteojos que parecen de los años ochenta. Anastasia pregunta con curiosidad:

_ ¿Cómo podrían 10.000 toneladas de acero pesar menos que un cilindro de aire que ocupe las mismas dimensiones que la torre? Los ojos de Painlevé se iluminan como un estudiante que estudió mucho para una prueba.

_ ¡Ah, la señora está interesada en las ciencias! responde frotándose las manos. Estaré encantado de educarla sobre el tema. La estructura de metal, pesa 7.300 toneladas el resto del peso de 2.700 toneladas es por los restaurantes, museo y tiendas que se han añadido posteriormente. Si se funde todo el metal, llenaría una base cuadrada de 125mts con una profundidad de solo 6cm suponiendo que la densidad del metal sea de 7.8 toneladas por metro cúbico. La torre tiene una masa menor que la masa del aire contenida en un cilindro de las mismas dimensiones de 324 metros de altura y 88,3 metros de radio. El peso de la torre es de 10.000 toneladas frente a 10.265 toneladas de aire.

El Sr. Painlevé termina su respuesta sonriendo por haber explicado sus especificaciones científicas y Anastasia se voltea un poco y me mira ahogándose de la risa.


_ ¡¿Qué?! ​Le susurro en tono burlón.

_ Se parece a Sheldon Cooper, pero mucho más viejo y francés, dice sonriendo.

_ ¿Quién es Sheldon Cooper? ¿Un ex-novio tuyo de tu clase de física?  Le susurro entre dientes.

_ ¡No, tonto! Se ríe más. Monsieur Painlevé parpadea y nos mira sin saber lo que estamos susurrando. Niego con la cabeza. 

_ Me acaba de hacer una observación, le digo para tranquilizarlo y él sonríe amablemente con mi  respuesta. Entonces me doy la vuelta mirando a Ana.

_ ¡Me estás volviendo loco! ¿Quién demonios es Sheldon Cooper?

_ Suéltate el cabello señor Grey. No debes estar preocupado. Es un personaje de una seria de televisión llamada The Big Bang Theory. Él es un físico teórico nerd, muy egoísta y que a menudo se jacta de su inteligencia. Carece totalmente de habilidades sociales, le teme a los gérmenes y no tiene contacto físico con nadie, es introvertido, y siempre hace una observación o una declaración que nadie entiende. Ni siquiera se preocupa porque le entiendan ¡Claro que no  soy Newton! ¡Yo habría descubierto la gravedad aun sin la manzana! dice imitando una voz masculina.

_ Cuando el guía habló de las matemáticas de la torre, me recordó a ese personaje y no me equivoqué, se encoge de hombros, pero mi mirada se oscurece hacia ella. Ella frunce el ceño, ¡Y, por amor de Dios, deja de mirarme así! me susurra regañándome ¿No puedo hacer una observación sin que sientas envidia de un personaje de ficción? Murmura suspirando.

_ Por favor, recuerda que sólo tengo un tipo; y es Christian Grey, susurra. Yo sostengo su mano con fuerza y giro hacia donde está nuestro guía, indicándole continuar. Lo que Ana no sabe o no se ha percatado, es que ahora, dada la condición de ser mi esposa, ella está en la posición de conocer a cualquier artista o famoso que se le ocurra y eso me da celos.  


_ La mejor vista es por supuesto observada desde el tercer piso, dice con su acento francés. ¿Vamos? Dice el guía y nos indica la entrada con su mano derecha. Tomamos el ascensor hasta el tercer piso y finalmente la ciudad de París se muestra ante nosotros en toda su magnificencia.


_ He aquí la belleza de París, dice Monsieur Painlevé. Él habla de la historia, y la gente que se involucró en la creación de esta obra maestra. Entonces nos deja solos para disfrutar de la espectacular vista de París desde el tercer piso de la torre. Una vez finalizado nuestro tour, almorzamos en el Le Jules Verne ubicado en el segundo nivel de la torre. El restaurante está reservado con semanas de antelación, tiene una gran selección de vinos y una cocina francesa excepcional.

Pero lo más destacado de la jornada es el Versalles. Painlevé se encuentra con nosotros en el Chateau de Versalles.

_ Bienvenue sur le château de Versailles, dice. El Palacio de Versalles es pobre comparado con la riqueza histórica de la arquitectura barroca, explica el señor Painlevé cuando levanta sus cejas y empuja sus gafas sobre su nariz una vez más.


_ El palacio y los jardines de los alrededores son espectaculares y de exquisito  detalle. Lo erigieron en medio de un capo que una vez estuvo desolado. La inspiración de estos jardines vino del renacimiento italiano, pero, por supuesto, los italianos nunca habrían hecho esta opulencia y magnificencia como los franceses, añade con orgullo.


Anastasia se aclara la garganta. 

_ Sr. Painlevé, ¿no crees que esa declaración  un poco racista?

Parpadea hacia ella como si Ana le estuviera hablando en latín.
_ Nada más lejos de la verdad Madame. La verdad no puede ser interpretada como racismo, por cierto eso es una expresión muy americana. Aquí no es percibida como tal. Incluso los italianos saben eso. Tal como dice el dicho “El cielo es de la policía británica, pero los cocineros son franceses” dice con orgullo.
_ Los mejores mecánicos son los alemanes, del italiano me atrevo a decir que son mejores amantes y la mejor organización la tienen los suizos, dice. Sería un infierno vivir en donde la policía sea alemana, los cocineros ingleses, los mecánicos franceses, los amantes suizos y que todo estuviera organizado por los italianos, dice.
_ Estoy bastante segura de que los italianos tienen buenos cocineros, lo desafía Anastasia.
_ Oh, eso es Madame es discutible. ¿Qué tienen? Pizza y pasta... no puedo pensar en otra cosa.
_ Me encanta la pizza y la pasta, responde Anastasia completamente divertida de burlarse de la mierda de este hombre que se toma en serio sus chistes.
_ ¡Mon Dieu! ¡Monsieur Grey! Debe mostrarle inmediatamente a la señora la verdadera comida. Ella aún no la conoce.

_ Me dijeron que los italianos enseñan a los chef franceses a cocinar. ¿Estoy mal informada? Anastasia pregunta inocentemente y Painlevé  inmediatamente se tapa la boca con la mano para ahogar un gemido.  Aprieto la mano de Anastasia para recordarle que debe reducir la velocidad de sus palabras para salvar al pobre hombre de un ataque al corazón y proteger las relaciones franco-americanas. Taylor y los gemelos de seguridad, están tratando de ocultar una sonrisa.
_ Yo diría que está muy mal informada Madame, ¡muy mal informada! La Cocina francesa es famosa por sus salsas, pan, queso y vinos. Voy a dejar que usted y el señor Grey visiten inmediatamente algunos restaurantes franceses donde podrán experimentar la verdadera magnificencia de la cocina francesa, dice con fervor.
_ ¿Qué piensa usted de la comida griega? Anastasia pregunta, dejando a un lado la rivalidad italo-francesa.
Él suspira.
_ Los griegos son una gran civilización y para ser justos, señora, nos dieron la democracia, la ciencia y pequeños cubos de carne carbonizada que saben a sudor.  Es un hecho conocido que la cocina francesa es superior a todas las cocinas del mundo.
Los ojos de Anastasia primero se agrandan con su respuesta, conmocionada, pero también bailan con picardía, como si ella se está concursando en “World Kitchen Wars I”  Mejor detengo esto.

_ Creo que lo mejor es discutir acerca de la arquitectura francesa y no de las artes culinarias, digo intencionalmente. Aprieto la mano de Anastasia y la atraigo más a mi lado.
_ ¿Qué te pasa? Estás a punto de darle a este pobre hombre un infarto, quédate tranquila, le digo al oído.
_ No sé lo que me pasa, tengo ganas de alborotar el día, me susurra en respuesta. Entrecierro los ojos hacia ella.
_ Tal vez necesita un buen azote Sra. Grey, le susurro al oído.
_ He sido una chica mala. Tal vez un castigo no me vendría nada mal señor Grey, susurra ruborizada.
En el momento en que entramos al interior del castillo, Anastasia se sorprende con toda la opulencia y el esplendor del palacio dorado del siglo XVIII.
_ ¡Estoy completamente enamorada de Versalles! Nuestro guía sonríe y es evidente que él ya la ha perdonado.
Después de recorrer el Palacio, el guía se despide para dejarnos pasear a solas por todo el lugar. Sacude la mano de Anastasia con alegría.
_ Es usted una señora muy franca, debe tener sangre francesa en su ascendencia. Un honor haberlos conocido a ambos, dice y se va. Estoy completamente desconcertado y sorprendido de cómo Anastasia afecta a otras personas.
_ Venga, señora Grey, déjame mostrarle lo que otros megalómanos hacen por las mujeres que aman, y la llevo al Salón de los Espejos. La temprana luz de la tarde pasa a través de las ventanas iluminando todos los espejos que recubren la pared e iluminan la decoración dorada con sus enormes lámparas de cristal. Anastasia queda completamente hipnotizada, como si estuviera en un sueño espectacular del cual no quiere despertar.



_ Sí, es interesante ver lo que hace un déspota megalómano que se aísla con total esplendor, murmura cuando estoy de pie a su lado. Ella está tratando de hacer conmigo lo mismo que hizo con Pailavé hace un rato. La miro ladeando la cabeza.
_ ¿Su punto Sra. Grey? Le pregunto con humor. 

_ Oh, simplemente una observación, señor Grey, dice ella agitando la mano alegremente. Yo me río con su respuesta y voy tras ella hasta el centro de la habitación donde nos quedamos embobados por la vista. Hay algo increíble en este lugar. La vista de los espectaculares jardines reflejados en los espejos, pero luego la imagen de mi esposa se refleja con cada espejo. Ella es completamente valiente y absolutamente hermosa, sobre todo cuando se refleja la luz en su cabello castaño.
_ Me gustaría construir esto para ti, le susurro. Sólo para ver la forma en que la luz toca  tu cabello en este momento, y meto un mechón de pelo detrás de su oreja. Te ves como un ángel, un ángel travieso, pero un ángel, no obstante. La beso justo debajo de su oreja, y la tomo de la mano. Nosotros los déspotas megalómanos, Sra. Grey, hacemos esto por las mujeres que amamos. Ella se sonroja con mi cumplido. La sigo a través de la habitación y cuando ella se da la vuelta y me mira con un deseo en sus ojos, tomo suavemente su cara con mis manos y la beso con todo lo que tengo, nuestro abrazo se refleja en cada espejo como la estatua “El beso” de Rodin.  


Cuando rompemos nuestro beso, ella susurra: Estás muy descarado señor Grey.

Le sonrío escabrosamente con admiración. 

_ Estamos en la ciudad del amor, en un palacio construido en un terreno baldío que solía ser un pequeño sitio para cazas, pero Louis XIV lo reestructuró como un icono del poder absoluto y dominación temporal, algo así como un humilde comienzo, le digo.

_ Y como lo dices ahora... añade. 

Le sonrío, pero mi sonrisa no llega a mis ojos. Mi mirada se centra en ella.

_ Hay 357 espejos, 17 puertas de vidrio, paredes de mármol, lámparas de araña y pinturas espléndidas en el techo, todo crea un resplandor celestial que por supuesto era la intención del Rey.  Pero Ana, tú aquí de pie, eres la joya más brillante de todas. Y te miro así… enamorado, admirándote, es un espectáculo simplemente impresionante en toda su majestuosidad. Simplemente me tienes cautivado… lo que me haces sentir… le susurro suavemente.

Ella traga saliva y pasa sus brazos como serpientes alrededor de mi cuello.

_ ¡Qué cosas tan hermosas dices Christian! Llévame de vuelta al hotel, o busca una habitación privada en este palacio, no me importa donde. En este momento me gustaría ser completamente feliz y que me tomes aquí, susurra sin sentido.

_ Sra. Grey, te has convertido en una mujer completamente insaciable. ¿Qué he creado aquí?  Respondo con una sonrisa.

_ ¿Me quiere de cualquier manera señor Grey? Pregunta ella sonriendo.

_ De todas las maneras posibles nena. Vámonos ya, le digo y nos devolvemos al Hotel Crillon.
*****    *****

_ Ponte ropa cómoda y zapatos para caminar, cariño, le recuerdo en la mañana.

_ ¿Dónde vamos hoy? Pregunta con entusiasmo después del desayuno. 
_ Es una sorpresa. Esta es una ciudad extraordinaria Ana, con mucho que hacer. Podemos pasar toda la vida aquí y aún no experimentar todo. Ernest Hemingway vivió en París y dijo: “Si tienes la suerte de haber vivido en París en plena juventud, entonces donde quieras que vayas, para el resto de tu vida, se quedará contigo, porque París es una fiesta inolvidable” Esa sola frase  captura todo sobre París. Yo quiero que esta sea una experiencia que nunca olvides. También dijo  Il n’y a que deux endroits au monde où l’on puisse vivre heureux: chez soi et à Paris.le digo en francés lentamente. Ella me mira enamorada. Su pecho se eleva en un suspiro y se sonroja. Me mira sombríamente mientras camina alrededor de la mesa y se para delante de mí.
_ No tengo ni la menor idea de lo que acabas de decir, ¡pero sonó tan caliente que tengo ganas de lanzarme sobre ti!
_ Dije que “Hay dos lugares en el mundo donde se puede ser feliz: en nuestra casa y en París” Cité a Hemingway. Pero una vez que te has enamorado de París, simplemente no hay cura para eso, le digo  sonriendo y me giro en la silla para sentarla a horcajadas sobre mí. Ella envuelve los brazos alrededor de mi cuello y nos perdemos en un beso, hasta que Taylor viene discretamente y se aclara la garganta.
*****    *****

_ El Museo de Louvre es uno de los museos más grandes del mundo, le explico a Anastasia. 

_ ¿Qué? ¿No viene Monsieur Painlevé con sus habilidades?  Pregunta sonriente, batiendo sus pestañas inocentemente.
_ No. Decidí darle un descanso al pobre hombre ya que ayer lo dejaste sin fuerzas. Eres muy difícil de controlar. Ella se muerde el labio y yo rápidamente lo libero con mis manos y le susurro: por suerte me encantas de esa manera.
_ ¿Por qué suerte, señor Grey? Pregunta ella entrecerrando los ojos.

_ Digamos que me excita; me hace sentir vivo.

_ No es justo, ¿sabes? Susurra. 
_ ¿Qué no es justo? Pregunto. 
_ Eso que haces… ¡Incitarme en uno de los museos más grandes del mundo y dejarme caliente y mojada! Ella dice exhalando lentamente, tratando de calmarse. Sonrío ampliamente porque me hace sentir vivo y enamorado.

_ Te voy a enseñar algunas de mis exhibiciones favoritas aquí,  y tiro de ella en dirección a las antigüedades griegas, etruscas y romanas. Arte helenístico. La llevo al frente de la estatua de Afrodita.
_ Venus de Milo, susurra. 


_ Sí. Según la mitología griega, Afrodita es la diosa del éxtasis sexual. Ella nació de la espuma del mar en Chipre. Como puedes ver tiene una belleza sobrenatural. Zeus tenía miedo de que los dioses se pelearan por ella, creando problemas. Así que él la casó con Hefesto, el Dios herrero, adusto y feo de fuego. El estaba contentísimo de haberse casado con la diosa de la belleza y forjó una hermosa joyería para ella incluyendo el cesto, un cinturón. Pero por supuesto eso la hizo más irresistible a los hombres. La infelicidad en su matrimonio hizo que buscase la compañía de otros, normalmente Ares, el dios de la guerra, Adonis, el dios de la belleza y el deseo y también de Anquises que fue un amante mortal de la diosa.


También se cree que fue la causa de la guerra de Troya después de que Paris se enamorara de Helena. Sus seducciones y tentaciones eran una fuente constante de placer y peligro tanto para los dioses y los mortales que cayeron bajo su hechizo cautivante. Ellos fueron despojados de sus ingenios, y fueron atraídos a hacer cosas que normalmente no harían. Ella fue una combinación de placer y peligro. Afrodita no era mala. Simplemente estaba enamorada del amor. Era increíblemente apasionada y una romántica empedernida. Mira su cara, le señalo.
_ Se ve sin emociones. Su silueta alargada es muy sensual, de otro mundo. A pesar de que el escultor estaba tratando de crear la belleza divina, le digo  caminando alrededor de la estatua, y apuntando hacia ella, esta obra maestra fue creada a la respuesta de la búsqueda de la belleza que todos tenemos. El resultado es esta diosa del amor y la belleza, nacida de la espuma del mar.

Ella mira la estatua con cuidado, celosamente. 

_  eres mi Afrodita, Anastasia. Tú eres el amor eterno y la belleza que me pertenece. Tú eres mi obra maestra... le digo con reverencia.

 _ ¿Por qué...? ella dice y deja de mirar a la estatua. ¿Por qué crees que todos estamos fascinados por tanta belleza? Incluso yo no puedo quitar mis ojos de ella...  comenta.

_ Es simple. Todos podemos apreciar la forma femenina. Nos encanta mirarla en este mármol con una película de piel satinada. La belleza es agradable a la vista. Una obra maestra creada por Dios y nos gusta ver el reflejo de la misma en esta obras que nos cautivan como estas… le explico. 
Ella asiente con la cabeza y sonríe. 
_ Estoy cautivada por tu conocimiento y por tu belleza adónica Christian.

_ ¿Belleza adónica? Pregunto sonriendo. 
_ ¡Sí! Creo que eres una obra maestra. Una obra maestra que me pertenece... susurra. Si hicieran una estatua con tu cuerpo, la gente estaría mirándote por cinco mil años y admirarían la obra maestra de Dios. Espero que en la placa diga: Sr. Grey, esposo de Anastasia Grey, dice sonriendo alegremente.
_ Me gusta ese título, señora Grey. Me gusta mucho.

*****    *****


_ ¡Señor y señora Grey! Es un placer tenerlos a bordo del “Firts Lady”. Mi nombre es Nicolás Perri. Soy Capitán y organizador del mismo. Este es el segundo al mando, el Capitán David Madison.

Me presenta a un rubio delgado, con uniforme de capitán que estrecha mi mano y luego estrecha la mano de Anastasia.

_ Señora.

_ Y este que está aquí es el Maestre, el señor Alain Benoît. Nos presenta a un hombre de pelo oscuro, alto, joven como de mi edad, que alegremente sonríe y estrecha primero la mano de Anastasia.

_ Enchantée Mademoiselle, bienvenida a bordo, dice profesionalmente, pero con un brillo en sus ojos que no me agrada. Efectivamente, toma la mano de Anastasia y la besa en la parte posterior.

Mis ojos están fijos en él. ¡Apuesto a que está encantado! Además le dice señorita. Me aseguraré de hacerle saber que es la señora Grey, mi esposa.

_ Elle est señora Grey. Ma femme, Je suis M. Grey. Son mari.  Le digo y tomo la mano de mi esposa.  

_ Je m'excuse, Monsieur Grey. El hijo de puta se disculpa.   Je suis heureux de vous rencontrer. Bienvenue à bord. ¡Claro que sí bastardo!
_ Moi aussi. Le digo con mi mirada fija en la de él. Entonces me dirijo al Capitán Perri y le señalo un rincón para hablar en privado. ¿Me permite unas palabras señor Perri?

_ Por favor, llámeme Nick,  Sr. Grey.

Le hago una ligera seña a Taylor para que se lleve a  Anastasia a otro lado, quien sin entender lo sigue. Cuando Perri y yo caminamos a unos seis metros de distancia del Maestre y del Primer Oficial, me dirijo a él con toda la intensidad de mi mirada.

_ No quiero a  Benoît en el barco durante nuestra estancia. Me gustaría que buscara a otro Maestre para este viaje.

_ Le ruego me disculpe señor Grey ¿Lo ha ofendido de alguna manera? Le aseguro, señor; sus modales son puramente franceses y no he visto que esté fuera de la norma.

_ No me dé una lección de normas sociales. Conozco las costumbres ya que he vivido en Francia. Estoy pagando €63.000 por rentar este barco sin contar los gastos añadidos que suben la cuota a €100.000. Quiero un Maestre diferente en el que mi esposa y yo podamos estar cómodos al tenerle cerca.  

_ Muy bien, señor. Le enviaremos otro Maestre como reemplazo del Sr.Benoît. ¿Alguna otra cosa en lo que pudiera ayudarlo?

_ Sí, digo sonriendo después de haber resuelto el problema. ¿En qué año fue construido el buque?

El sonríe. Fue construido en 1928 señor, y reconstruido en el 2005 hasta 2006. Tomó cerca de 2 años completar el proyecto. Es un buque de Inglés, señor, añade con orgullo.

_ La mano de obra es exquisita, digo evaluando el buque.  ¿Cuál es su tamaño? Asumo que debe tener alrededor de unos 120 pies de largo...  le digo.

_ ¡Muy cerca señor! Su longitud es de 121 pies y 20,3 pies de ancho, la proa es de 10 pies señor.

_ ¿Qué clase de motores tiene?

_ Tenemos dos motores Gardner de 230 caballos, que nos permite navegar a 10,5 nudos.  

_ Impresionante. ¿Cuál es el tamaño de la tripulación?

_ Seis, señor.
_ ¿Qué clase de deportes acuáticos se pueden hacer desde el barco?

_ Si me permite hacer una observación señor, usted sabe de barcos muy bien.  Está haciendo todas las preguntas correctas. Bueno, tenemos una pequeña lancha de 5,2 metros Boston Whaler con  un pequeño motor de 130 caballos de fuerza, otra más pequeña modelo Jet Seasport 360 Avon, con un motor de 40 caballos de fuerza y dos pequeños botes veleros, además de equipo de buceo señor. Si desea utilizar cualquiera de ellos solo debe decirme.

_ Lo haremos. ¿Qué tipo de comunicaciones e instalaciones de entretenimiento hay a bordo?

_ Tenemos comunicación para celulares, también tenemos acceso a Wi-Fi y sistemas audiovisuales completos. TV vía satélite y soporte para iPod por todo el barco señor Grey. Si me permite, me gustaría darle una gira a usted y a su esposa.
Yo asiento y le hago un gesto con la mano para que siga adelante.
Camino hacia Ana y la tomo de la mano para dar un recorrido al Firts Lady en nuestra última semana de luna de miel. 





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Cada ciudad tiene sexo y edad, cosa que no tiene nada que ver con la demografía. Roma es femenina. Lo mismo es Odessa. Londres es un adolescente, y esto no ha cambiado desde la época de Dickens. París, creo yo, es un hombre de unos veinte años enamorado de una mujer mayor.
John Berger


L'Americain de Paris, c'est ce que l'Amerique a fait de mieux. (El americano en París es el mejor de América). Francia tiene dos cosas que deriva a medida que envejecemos, la inteligencia y las buenas maneras.
F. Scott Fitzgerald


3 comments:

  1. Gracias Patricia por continuar con la traducción, un abrazo enorme.
    Andrea desde Arg.

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  2. Gracias Emine bello capitulo, que envidia de luna de miel, y con el señor Grey es mucho mas especial, y Patricia mi amiga querida, gracias por continuar la traducion, sabes que te amooooo por hacerlo, eres una genio, y te felicito, un besote amiguis.

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  3. Muchas gracias por tu esfuerzo, no cabe duda que es una tarea pesada, y mira que te faltan muchos, acabo de ver que en inglés van a empezar el libro 5, arriba niña, y nuevamente gracias. Un abrazo

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