Friday, November 29, 2013

Libro I - Capítulo XVIII: CINCUENTA SOMBRAS DE GREY - CHRISTIAN Y ANASTASIA

CAPITULO XVIII

ADIVINA QUIEN VIENE A CENAR


  Traducido y editado por: Patricia Pinto



_ Bien hecho, cariño, murmuro. ¿Te dolió?

_ No, ella apenas puede respirar una respuesta, tampoco puede mantener los ojos abiertos. 

_ ¿Esperabas que te doliera? le susurro mientras la sostengo y retiro unos mechones de pelo de su cara.

_ Sí, responde ella cansada.

_ ¿Ves Ana? La mayor parte de tu miedo está en tu cabeza, le digo. Pero lo que quiero saber es si ella querría volver a hacerlo. ¿Lo harías de nuevo? Pregunto vacilante. Hace una pausa por un momento, cansada.

_ Sí, ella contesta con una voz suave y es mi perdición. Yo realmente, realmente no sé como esta mujer me tiene con este extraño sentimiento, no identificado. La abrazo con fuerza.

_ Bueno, yo también, me quejo, luego me inclino y beso suavemente la parte superior de su cabeza.

_ Y no he terminado contigo, le digo, porque yo la he estado esperando durante días y semanas. Sus ojos se están cerrando cuando estoy envuelto alrededor de ella. Ella da la vuelta a su cara hacia mi pecho, e inhala profundamente, pero ese movimiento me pone tenso. Ella abre los ojos y me mira. Miro hacia abajo con una mirada de advertencia.  

_ ¡No! Le digo con fuerza. Ha roto el hechizo. Ella me ve como si tratara de derretir mi corazón oscuro.   

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_ Arrodíllate junto a la puerta, le ordeno. De alguna manera, mi voz se enfría debido a mi afefobia, no puedo ser tocado, eso es algo irreversible en mí.  Mi límite duro ha sido violado y yo trato de ganar la compostura. Ella torpemente se levanta y se escabulle hacia la puerta y se arrodilla de acuerdo a  las instrucciones que le di, temblorosa y cansada. Me muevo alrededor de ella, pero ella está con los párpados pesados, su cabeza está caída en el sueño.

_ ¿La estoy aburriendo señorita Steele? Le pregunto haciéndola despertar. Estoy de pie frente a ella con los brazos cruzados mirándola. Cuando sus hermosos ojos azules me miran, mi mirada se suaviza. Siempre hay algo en ella que tira de las cuerdas de mi corazón.

_ Levántate, le ordeno y ella con cautela lo hace.

La miro y mi boca se arquea en una sonrisa.

- ¿Estás destrozada no es así? Pregunto. Ella asiente con timidez ruborizada.
Aguante, señorita Steele, le digo.

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Es por eso que quiero que haga ejercicios. Estrecho mis ojos hacia ella.

_ Yo aún no he tenido suficiente de ti. Extiende las manos como si estuvieras rezando. Ella parpadea como si no ha  escuchado bien.

_ ¿Rezar? Ella pregunta confusa, como si este fuera el lugar más extraño para orar. Pero  finalmente hace lo que se le dice.  Tomo una abrazadera de cables y la fijo alrededor de sus muñecas, apretando el plástico. Sus ojos se vuelven a los míos.

_ ¿Le resulta familiar? Le pregunto, incapaz de ocultar mi sonrisa, por la pequeña broma que le he jugado.  Ella abre los ojos recordando que son las que me vendió y los picos de adrenalina suben de nuevo a su rostro. Así que he logrado su atención y se ha despertado de nuevo. 

 _ Tengo unas tijeras aquí, le digo levantándolas para que ella vea.

_ Las puedo cortar en cualquier momento, le digo para tranquilizarla. Ella trata de tirar de sus muñecas probando sus ataduras, pero mientras trata de separarlas, el plástico se clava en la carne. Mientras no trate de separarlas estará bien, de lo contrario cortarán su piel.

_ Ven, le dije tomando sus manos atadas y la llevo hasta la cama con dosel. Ella se da cuenta que está tendida con sábanas de color rojo oscuro y que tienen un grillete en cada esquina, mira hacia mí con asombro y curiosidad.

_ Quiero más, mucho, mucho más, me inclino y le susurro al oído. Pero voy a ser rápido. Estás cansada. Agárrate del poste, le digo y su corazón comienza a golpear rápidamente de nuevo. Ella está emocionada, frunce el ceño, al darse cuenta de que no va a estar en la cama. Ella abre sus manos mientras se agarra del poste de madera tallada.

_ Más abajo le ordeno. Bien. No te sueltes. Si lo haces, te voy a azotar ¿Entiendes?  Le advertí.

_ Sí, señor, dice ella como la niña buena que es.

_ Bien.

Me coloco detrás de ella y le agarro las caderas y luego la levanto rápidamente hacia atrás para que se incline hacia delante, ella se aferra al poste.

_ No te sueltes Anastasia, le advertí. Voy a tomarte duro por detrás. Sostente del poste para mantenerte en equilibrio. ¿Entiendes?

_ Sí, dice ella, y le doy una nalgada dura con la mano abierta. Aunque esté cansada tiene que dirigirse a mí con respeto.

_ ¡Ayy...! dice, y luego modifica su afirmación murmurando un sí señor rápidamente.

_ Abre las piernas le digo y meto las mías entre las suyas para separarlas aun más.

_ Eso está mejor. Después de esto te dejaré dormir, le digo y froto suavemente su espalda.

_ Tienes una piel hermosa Anastasia, le digo mientra me agacho y beso su columna vertebral con ligeros besos muy suaves. Al mismo tiempo, mis manos se mueven alrededor de su frente colocando las palmas en sus pechos y tiro suavemente de sus pezones entre mis dedos, ella ahoga un gemido mientras su cuerpo responde, volviendo a la vida una vez más para mí. Muerdo suavemente y chupo  su cintura tirando de sus pezones y sus manos aprietan el poste tallado. La suelto y agarro un paquete de condón y arranco el papel de aluminio y me quito mis jeans.

_ Tienes un culo sexy y cautivador, Anastasia Steele. Lo que me gustaría hacer con él le digo emocionado. Coloco mis manos en cada una de sus nalgas y al ver sus pliegues tan húmedos, deslizo mis dedos hacia abajo introduciéndolos en su interior.

_ Siempre mojada, nunca decepciona señorita Steele le susurro y le doy mi señal.

_ Agárrate fuerte... esto va a ser rápido  nena, le digo agarrando sus caderas y me posiciono. Tomo su trenza con la otra mano enlazándola alrededor de mi muñeca hasta la nuca, para que voltee su cabeza. Muy poco a poco entro con facilidad en ella, tirando de su cabello al mismo tiempo. Estoy completamente dentro de ella, somos un ajuste perfecto. Me encanta así apretada,  sin dilatarse. Salgo ligeramente y luego entro rápido contra ella, una y otra vez manteniendo el ritmo. Ella no puede moverse, solo tiene que aceptar lo que le doy. Siento que se inclina un poco hacia adelante y le grito a través de mis dientes apretados.

_ ¡Aguanta Anastasia! Ella tiene que aprender que así es como me gusta follar, como un animal y muy duro.  Ella se agarra más fuerte alrededor del poste y empuja hacia atrás contra mí mientras yo continúo mi asalto implacable en ella una y otra vez, mis dedos clavándose en su cadera. Siento que ella se pone cada vez más débil con la nueva acumulación de otro orgasmo.   Sigo moviéndome contra ella, dentro y fuera y nuestra respiración se mantiene agitada. Siento que se contiene ante el inminente orgasmo y yo estoy llegando al mío, pero no quiero que se contenga, quiero que se corra para nuestro beneficio.

_ Vamos Ana dámelo, le pido y ella gloriosamente me obedece. A medida que se contrae alrededor de mí es mi señal para dejarme ir. Llegamos los dos al borde cayendo en pedazos y terminamos en el suelo. Sentí las estrellas pasar ante mis ojos.  Eso fue jodidamente alucinante.

Poco a poco recuperamos los sentidos mientras está tumbada de espaldas encima de mí.

_ Levanta tus manos, le digo en voz baja. Ella levanta sus brazos y con una sola pasada de la tijera, corto el plástico.

 _ Declaro inaugurada a esta Ana, le digo bromeando con ella y ella se ríe frotando sus muñecas que están en libertad.  Su risa me hace sonreír, es el sonido más hermoso en la tierra, porque significa que está feliz y me encanta oír su risa despreocupada y alegre. 

I’m on Top of the World - the Carpenters


 _ Ese es un sonido hermoso, le digo con aire taciturno. Me siento culpable y triste, de repente, de que ella no esté tan contenta como debería estar. Me incorporo súbitamente, llevándola conmigo una vez más sentada en mi regazo.

_ Esa es mi culpa, le digo y me acomodo para frotar sus hombros y brazos para quitar el dolor que se haya acumulado de nuestro encuentro alegre. La masajeo suavemente. Ella se vuelve hacia mí tratando de descifrar el significado de mis palabras.

_ ¿El qué?

_ Que no rías más a menudo, le digo con voz triste.

_ Yo no soy muy risueña, murmura adormilada.
_ Oh, pero cuando sucede señorita Steele, es una maravilla y un deleite contemplarlo, le digo con mis ojos  brillantes.

_ Muy florido señor Grey, murmura, apenas tratando de mantenerse despierta mientras sus ojos están caídos.

_ Yo diría que estás bien follada y con necesidad de dormir, le digo con un brillo travieso en los ojos.

_ Eso no fue nada florido, refunfuña juguetonamente. Le sonrío y me levanto junto con ella. Recojo mis jeans y me los pongo.

_ No quiero asustar a Taylor, ni a la señora Jones, murmuro juguetonamente. Me agacho para ayudarla a ponerse de pie y la llevó hasta la puerta.  En la puerta está la bata que traje para ella y estoy feliz de vestirla. Parece un niño pequeño. Ella está completamente gastada; sus miembros no tienen fuerzas suficientes para levantarse. Cuando está cubierta y respetable me inclino y la beso suavemente, contento porque ha sido completamente mía y solo mía, me agrada tanto que reflejo una gran sonrisa.  

_ A la cama, le digo y la expresión de asombro en su rostro me hace sonreír... Otra expresión que no tiene precio. Para dormir, agrego tranquilizándola. Claro que quiero más, pero no seré un degenerado con ella. Siempre he tenido un deseo sexual muy alto, por lo que fue una tortura para mí cuando era un adolescente caliente, frustrado y sin poder ser tocado. Normalmente una sesión en mi cuarto de juegos son como mínimos tres polvos, generalmente cuatro, depende de la escena que haya preparado.

La cargo y la llevo acurrucada contra mi pecho a su dormitorio, donde fue examinada por la Dra. Greene el día de hoy. Su cabeza cae contra mi pecho totalmente agotada. Retiro el edredón y la acuesto. Me pongo a su lado porque después de su primera experiencia en el cuarto de juegos, no quiero que me oculte nada, y yo como su Dominante me tengo que asegurar de que esté bien. Pero en el fondo sé que es porque también me gusta dormir con ella.   
_ Duerme ahora, preciosa, le susurro besando su cabello. Y cuando ella se acurruca en mis brazos, los dos nos dejamos llevar por el sueño.

Me despierto antes que ella cuando el sol se está poniendo. La miro y la veo completamente saciada y relajada durmiendo en mis brazos. Puedo verla durante horas. Mientras trato de sacar el brazo de debajo de ella, ella se agita inquieta como si algo la está molestando. Froto su cabello y la acaricio y le beso  la parte superior de la cabeza tratando de calmarla. Ella se relaja. Ella se ha consolado por mi presencia como me consuela la suya. El pensamiento me hace suspirar con asombro. Ella es mi pareja perfecta. Finalmente la libero de mis brazos y lentamente me muevo, cubriéndola. Su brazo se mueve para buscarme. Poco a poco me voy hasta la puerta y la escucho hablar.

_ ¡Christian no te vayas!

_ Yo sólo voy..., pero me doy cuenta de que ella está completamente dormida. Ella está hablando sueños.

_ Por favor.... Me encanta... murmura preocupada, moviéndose inquieta en la cama gimiendo, como si algo le está haciendo daño. Vuelvo a la cama y me acuesto a su lado. Froto su pelo de nuevo para calmarla.

¿A ella le encanta que? O más bien ¿quién? Poco a poco me levanto de nuevo y la alejo de mis brazos y ella cae otra vez en un sueño profundo. Me acerco de puntillas a la puerta. Entonces oigo su voz con toda claridad... las palabras que dice me detienen en seco: Te amo Christian… no me dejes… suplica en su sueño. Mi boca se abre, me siento en una silla en la esquina y la miro fijamente. ¿Qué debo hacer con esta información? ¡Ni siquiera puedo empezar a procesarla! No soy digno de su amor... de ningún amor. ¿Qué fue lo Elena me dijo sobre el amor? que es una emoción inútil que te quita el control...  voy a terminar rompiendo su corazón... ¡Vete a la mierda! 


Break Your Heart by Taio Cruz

Estoy confundido, eufórico, alegre, sorprendido. Poco a poco me salgo de su habitación perdido en mis pensamientos para tomar una ducha y prepararme para la noche.

Ya listo para la visita a mis padres,  le preparo a Anastasia una bebida con jugo de arándano y Perrier. La traigo a su habitación y lo pongo sobre la mesa de su lado. Espero que la ayude a darle un poco de energía cuando se despierte.

Despierto a Anastasia cepillando suavemente mis labios sobre su sien y la besó con ternura, pero ella está demasiado cansada y quiere seguir durmiendo.  Ella gime y se entierra en su almohada.

_ Anastasia, despierta, le digo suavemente.

_ No, ella gime.

_ Tenemos que salir en media hora para la cena en casa de mis padres. Digo divertido. Ella abre los ojos a regañadientes. Sus ojos parpadean al cielo exterior. Es el anochecer. Me inclino, mirándola fijamente.

_ Vamos dormilona, levántate. Me agacho y la beso de nuevo.

_ Te he traído una copa. Estaré abajo. No te vuelvas a dormir o vas a estar en problemas, la amenazo, pero mi tono es suave. La beso breve y dejo la habitación.

Yo tengo mi iPod colocado en mi estéreo y Frank Sinatra está cantando lejos. Estoy en mi ropa habitual, camisa blanca de lino y pantalones de franela gris colgando de mis caderas. Miro fuera de mi ventanal la silueta de Seattle en la noche que se acerca. Mi mujer está en mi casa, preparándose para visitar a mis padres conmigo. Es una sensación extraña, pero luego extrañamente me reconforta. Eso es otra señal que la distingue como mía. Siento su presencia detrás de mí y la veo. Puedo sentir esa energía que nos sacude cada vez que estamos uno frente al otro. Me doy vuelta y le sonrío. Ella está bien vestida, con algo menos por supuesto, ya que su ropa interior se encuentra ahora en mi bolsillo. Quiero que me ruegue por ella. Vamos a ver cómo va a responder a mi pequeño juego.

_ Hola, dice ella, igualando mi sonrisa.

_ Hola, le digo de nuevo. ¿Cómo te sientes? pregunto divertido.

_ Bien, gracias ¿y tú?  Pregunta. No podría estar mejor.

_ Me siento muy bien, señorita Steele, respondo, esperando que me pregunte por sus bragas.  

_ Frank... Hmm. Nunca te imaginé como un fan de Sinatra, dice ella con curiosidad, sorprendiéndome. Levanto una ceja en respuesta. ¿No me las va a pedir?

_ Tengo gustos eclécticos señorita Steele, murmuro y me muevo rítmicamente hacia ella con una mirada intensa. Me doy cuenta que su respiración cambia cuando ve mi postura. Cuando Sinatra comienza cantando Brujería, paso las yemas de mis dedos por su cara hasta el cuello.  Ella cierra los ojos en éxtasis.   ¡De repente, yo quiero tenerla en mis brazos, y bailar con ella, como si no hubiera mañana!

_ Baila conmigo, murmuro con voz ronca. 


Witchcraft - Frank Sinatra

Tomo el control remoto de mi bolsillo y subo el volumen. Levanto mi mano pidiendo la de Anastasia y una vez más, estoy lleno de ganas de tenerla en  mis brazos otra vez. Estamos embrujados entre nosotros y puedo ver que mi sentimiento se refleja y es correspondido en sus ojos.  Tan pronto como su mano toca la mía, nuestra sacudida de conexión habitual comienza a correr a través de nuestros cuerpos. Con un renovado sentido de deseo, yo la abrazo y curvando el brazo libre alrededor de su cintura, empezamos a bailar.

Ella extiende y pone su mano libre en mi hombro y me sonríe. Sólo somos dos personas jóvenes, juguetonas, disfrutando el momento.  Giramos desde la ventana de la cocina que abarca el gran salón, girando y girando,  al compás de la música. Ella me sigue mientras nos deslizamos en torno a la mesa del comedor, hacia el piano,  hacia atrás y hacia delante en frente de la pared de vidrio, ya Seattle se ve brillante en sus luces. Es la hora de las brujas, con esta mujer fascinante y este paisaje cautivador con una silueta de Seattle llenando completamente el fondo, mi mujer en mis brazos, bailando bajo el hechizo de  una voz aterciopelada, embrujándome... Ella se ríe de alegría absoluta, cautivada por todo lo que hago, no puedo mantenerme tranquilo, pero sonrío hacia ella y en un murmullo le digo: No hay ninguna bruja más agradable que tú y la beso dulcemente.

_ Bueno, ya que he traído un poco de color a sus mejillas señorita Steele. Gracias por el baile. ¿Vamos a conocer a mis padres?

_ De nada y sí, no puedo esperar para conocerlos, responde ella sin aliento.

_ ¿Tienes todo lo que necesitas? Todavía tengo las bragas en mi bolsillo y en espera de que ruegue por ellas.

_ Sí, responde dulcemente batiendo sus pestañas.

_ ¿Estás segura? Compruebo.

Ella asiente con indiferencia bajo mi mirada intensa. Estoy completamente divertido por su despreocupación. ¿Quieres ir a la casa de mis padres con el culo desnudo? ¡Anastasia Steele, usted es otra cosa!  Ya no puedo seguir el ritmo más y mi cara se divide en una enorme sonrisa y niego con la cabeza.

_ Está bien. Si así es como quiere jugar señorita Steele, digo cogiendo su mano, recojo mi chaqueta que está colgado en uno de los taburetes de la barra y la llevo al vestíbulo del ascensor bajar al garaje.

Cuando estamos en el ascensor,  su mirada va hasta mi cara. Yo sé que ella no tiene nada debajo de su vestido y me gustaría ver lo lejos que ella va a manejar eso. Creo que la idea es caliente. Ella va a la casa de mis padres sin nada debajo del vestido. Sabiendo lo tímida que es, apuesto a que está lamentando esa decisión ahora. Mi mente se tambalea con los tipos de juegos que puedo hacerla pasar por esta noche. !Oh, nena, tú eres la causante de esto y mi objetivo es jugar! Vamos a ver hasta dónde usted puede llegar... El ascensor desciende rápidamente y sin problemas. Pero la carga usual entre nosotros se acumula de nuevo y mi recuerdo vuelve al ascensor de Hotel Heathman. Algún día, voy a follarla en el ascensor, pero no ahora. Siento que mis ojos se oscurecen con el deseo por ella cuando nuestras miradas se encuentran de nuevo. Pero de un golpe las puertas del ascensor se abren y la magia todavía está colgando en el aire. Cierro los ojos y trato de sacudir las nubes lejos de mi cabeza. Hago un gesto para que ella salga antes que yo del ascensor de manera caballerosa, pero no hay nada caballeroso en mis pensamientos acerca de ella. ¡Y ella lo sabe!

Taylor hace subir el Audi SUV. Abro la puerta trasera para Anastasia y ella trata de trepar en el interior lo mejor posible tratando de no mostrar su culo desnudo. El vestido púrpura es pegajoso y se cuelga muy bien en la parte superior de las rodillas. De lo contrario, habría estado demasiado celoso.

Aceleramos en la autopista I-5, los dos en silencio durante un rato. Mi mente está como un tornado. Miro desde mi ventana a la ciudad oscureciendo sentado junto a la mujer que me ha cautivado en las últimas semanas. Ahora voy a llevarla a conocer a mi familia... oficialmente, como mi novia. ¿Qué me está pasando? Ella me gusta muchísimo. No puedo ordenar mis sentimientos por su culpa. Por un lado, me gusta mi independencia. Me gusta mi dominio. ¿A quién estoy mintiendo? Me encanta mi dominio, yo no creo que pueda renunciar a eso. Me encanta mi estilo de vida... Y por el otro lado me siento amenazando por todos estos sentimientos que estoy conociendo sin esfuerzo. Si no estoy a su alrededor, me siento miserable y hago a todo el mundo miserable. Me encuentro a mí mismo pensando en ella cada minuto del día y en mis sueños. Tengo estas emociones sin nombre que me están volviendo loco. Me pongo celoso incluso si alguien menciona su nombre, como si fuera algo sagrado del que no deben hablar. Estoy perdido y ahogándome en mis pensamientos. ¿Anastasia mi sumisa? ¿Anastasia mi novia sumisa? ¿Anastasia mi novia? Nunca he dejado que estos dos mundos se encuentren. Mi familia y una sumisa. He sido muy cauteloso con eso y ahora aquí estoy… más confundido que nunca.

_ ¿Dónde aprendiste a bailar? Me pregunta con una voz suave, vacilante. Esto me lleva fuera de mis ensueños, pero no fuera de mi miseria. Vuelvo la mirada hacia ella, la tristeza cubre mis ojos.

_ ¿De verdad quieres saberlo? Le contesto en voz baja.

No puedo verla bien en la oscuridad, pero la luz que pasa brilla y veo una mirada en su rostro cayendo.

_ Sí, murmura a regañadientes.

_ La Sra. Robinson era aficionada a bailar, le digo. Ella suspira.

_ Debe de haber sido una buena maestra, ella responde.

_ Lo fue, yo digo la verdad, en voz baja.

Trato de ver su rostro en la oscuridad, algunas emociones tristes parpadean a través de él, pero luego veo un atisbo de sonrisa. Sus manos se frotan las muñecas reflexivamente. Ella debe estar pensando en nuestro enlace de esta tarde. Su mirada cae otra vez, y ella fija su vista fuera de la ventana, y se pierde en un pensamiento triste por su cuenta. Yo no quiero que sienta lástima por mí. Ella se preocupa por mi relación pasada con Elena. Ella es mi pasado ahora. Ella inhala una bocanada de aire como si apenas sostiene  sus emociones.

_ No, murmuro.

Vuelve la cabeza hacia mí. No, ¿qué? Ella pregunta confundida.

_ No pienses demasiado las cosas Anastasia le digo, incapaz de resistirme a su atracción. Extiendo la mano y agarro la suya y  la beso en los nudillos suavemente. He tenido una tarde maravillosa. Gracias. Le digo con sinceridad.  Ella parpadea hasta mí y sonríe tímidamente.

_ ¿Por qué utilizaste una abrazadera de cables? Me pregunta susurrando y me hace sonreír hacia ella.

_ Es rápida, fácil y algo diferente para que sientas la experiencia. Sé que parecen algo brutal, pero me gustan que las sujeciones sean así, muy eficaz para mantenerte en tu lugar, le digo sonriendo.
Ella voltea con nerviosismo mientras su mirada va por encima de Taylor. El está impasible y sus ojos están en el camino. Taylor ha conocido  mi estilo de vida desde el primer día. Es mi empleado más confiable y responsable de mi seguridad personal. Todo esto es parte del paquete que soy. Me encojo de hombros.

_ Todo es parte de mi mundo Anastasia le digo apretando su mano, y luego soltándola. Ella vuelve la cabeza y mira por la ventana, perdida en sus pensamientos de nnuevo. Me vuelvo para mirarla.  Ella se ve como si estuviera encerrada, sofocante. Siente mi mirada en ella y vuelve la cabeza para mirarme.

_ ¿Un penique por tus pensamientos? Le pregunto.

Ella suspira y frunce el ceño.

_ ¿Tan malos son?

_ Ojalá supiera lo que piensas tú, dice sorprendiéndome. Sonrío hacia ella. Mejor que ni se imagine la mierda que pasa por mi cabeza, porque seguro que saldría corriendo.

_ Lo mismo digo nena, le digo en voz baja. Cómo me gustaría saber lo que estabas pensando.

Por último el Audi llega a la entrada de la mansión de estilo colonial de mis padres. Es un lugar de ensueño.

_ ¿Estás lista para esto? Le pregunto cuando nos detenemos en la puerta. Ella asiente con la cabeza, y le doy en la mano otro apretón tranquilizador. Está nerviosa, conocer a los padres de un chico por primera vez… aunque también es la primera vez para mí.

_También es la primera vez para mí, le susurro y sonrío con malicia hacia ella, apuesto a que desearías llevar tu ropa interior en este momento, le susurro burlándome de ella. Ella tuvo su tiempo de pedírmelas amablemente, así que fue su decisión venir con el culo al aire. Se pone roja como una remolacha. Taylor ha salido y abre la puerta de Anastasia. Ella frunce el ceño y sonrío ampliamente a cambio, saliendo del coche.

Mi madre, la Dra. Grace Trevelyan-Grey está en la puerta esperándonos. Está en un vestido de seda azul pálido con elegancia sofisticada. Detrás de ella mi padre  alto, rubio y de apuesto porte.

_ Anastasia, ya conoces a mi madre, Grace. Este es mi papá, Carrick, le presento a mis padres.

_ Señor  Grey  un placer conocerlo, sonríe y saluda con la mano tendida.

_ El placer es todo mío, Anastasia, él responde educadamente.

_ Por favor, llámeme Ana. Sus ojos azules se ablandan.

_ Ana, qué alegría verte de nuevo, dice mi mamá envolviéndola en sus brazos. Entra, querida.

_ ¿Ya ha llegado? Escuchamos un chillido desde dentro de la casa. Por supuesto que es Mia.

_ Esa es Mia, mi hermana pequeña, le digo con mucho amor. La amo más de lo que me irrita. Efectivamente Mia viene a toda velocidad por el pasillo, de pelo negro, alta y curvilínea.

_ ¡Anastasia! He oído hablar mucho de ti, ella dice abrazándola con fuerza.

_ Ana, por favor, murmura cuando Mia la lleva al vestíbulo.

_ Nunca ha traído una chica a casa antes, dice Mia con sus ojos azules oscuros iluminados por la emoción.

_ Mia, cálmate, mi madre le amonesta.

_ Hola cariño, me saluda mientras me besa en las mejillas. Sonrío hacia ella, y estrecho la mano de mi padre. Todos entramos y nos dirigimos a la sala, mientras que Mia todavía está agarrando la mano de Anastasia. Cuando entramos en la sala de estar elegantemente decorada, nos encontramos con Kate y Elliot que están abrazados juntos en un sofá, sosteniendo unas copas de champán. Cuando Mia finalmente libera la mano de Anastasia Kate la saluda.

_ ¡Hola Ana!  Y luego dice Christian… en un saludo todo cortante.

_ Kate, le devuelvo el saludo. Anastasia frunce el ceño ante nuestro intercambio. Elliot agarra a Anastasia en un abrazo que la abarca toda. Yo estoy al lado de Anastasia envolviendo mis brazos alrededor de ella, colocando posesivamente la mano en su cadera; extendí mis dedos y tire de ella toda para mí. Aunque es mi hermano no quiero que otro hombre la toque.

De pronto todo el mundo está mirándonos a nosotros, como si fuéramos alguna celebridad. ¡Vaya! Realmente están sorprendidos y ahora me doy cuenta de que no había duda de que me creían gay. Anastasia se siente incómoda.

_ ¿Algo para beber? Mi padre nos pregunta finalmente recobrándose después de ver la confirmación de que su hijo no es gay. ¿Prosecco?

_ Por favor, Anastasia y yo respondemos al unísono. Esto es extraño. Mia aplaude con sus manos en nuestra respuesta sincronizada.

_ Pero si hasta dicen las mismas palabras dice ella, rápidamente saliendo de la habitación. Cuando ella mira hacia atrás a Kate y Elliot de nuevo, su mirada cambia. Ella tiene una mirada triste y deprimida. ¿Qué ha pasado? ¿Por qué está molesta? Estos son los momentos en que me gustaría saber qué pasa por su mente.

_ La cena está casi lista, dice mi madre mientras ella sigue a Mia fuera de la habitación. La miro fijamente y frunzo el ceño al ver su expresión. ¿Qué está mal? ¿Por qué está molesta?

_ Siéntate, le ordeno y apunto al sofá. Ella hace lo que se le dice, cruzando cuidadosamente sus piernas. Me siento a su lado, pero yo no la toco.

_ Estábamos hablando de las vacaciones Ana, dice mi padre amablemente.

_ Elliot decidió seguir a Kate y su familia a Barbados por una semana. Cuando miramos a Kate, ella está sonriendo con absoluta delicia.

_ ¿Vas a tomar un descanso ya que has terminado tu carrera? Pregunta mi padre.

_ Estoy pensando en ir a Georgia por un par de días, responde ella. Estoy completamente sorprendido, mirando a Anastasia. Esto es nuevo para mí. ¿Por qué no ha mencionado esto? ¿Cómo puedo manejar su ausencia? ¿Ella está huyendo de mí? Ahora pienso en lo que me escribió  en su e-mail, si pudiera se habría ido a Alaska. ¿Es esta su manera de huir?

_ ¿Georgia? murmuro preguntando.

_ Mi madre vive allí, y no la he visto en mucho tiempo, responde ella.

_ ¿Cuando pensabas ir? Les pido en voz baja, apenas controlada. Mi nivel de ansiedad se ha disparado por encima de mi límite tolerable.

_ Mañana al atardecer,  ella responde y yo estoy tratando de procesar esa información. En este momento, quiero ¡tomarla, azotarla, y follarla! Apenas puedo contenerme en mi asiento con mi familia alrededor. Mi mirada se fija en ella.

Mi hermana Mia se pasea de nuevo en la sala de estar y cada uno toma una copa llena de Prosecco  rosa.

_ ¡Salud! Mi padre levanta su copa. Me importa un carajo. ¡Mierda! ¡Se va! ¡Ella está corriendo! ¡Mierda! ¡Doble mierda! Apenas puedo controlar mi respiración. ¿Cómo puedo estar sin ella?

_ ¿Por cuánto tiempo?  Le pregunto en voz engañosamente suave, pero estoy más que enojado.

_ No lo sé todavía. Dependerá de cómo vayan mis entrevistas mañana.

Mi mandíbula se aprieta y Kate la trituradora de bolas consigue interferir en la conversación. ¡Mierda! 

_ Ana se merece un descanso, dice ella mirándome fijamente, el antagonismo se filtra a través de ella.

_ ¿Tienes entrevistas? Mi padre le pregunta.

_ Sí señor, para pasantías en dos editoriales mañana, responde Anastasia.

_ Te deseo lo mejor de la suerte.

_ La cena está en la mesa, mi madre anuncia.

Todos nos paramos. Kate y Elliot siguen a mi papá y a Mia fuera de la habitación. Cuando Anastasia se prepara para seguir, la agarro del codo, llevándola a detenerse bruscamente.

_ ¿Cuándo ibas a decirme que te ibas? Le pregunto con urgencia. Mi tono suave apenas está cubriendo mi rabia apenas contenida, a punto de estallar.

_ Yo no me voy. Voy a ver a mi madre, y yo sólo estoy valorando la posibilidad, ella responde.

_ ¿Qué pasa con nuestro acuerdo? Le pregunto con fervor. Pensé que teníamos un trato.

_ No tenemos un acuerdo todavía, me responde.  

Mis ojos se estrechan, estoy listo para castigarla, pero, este no es el lugar para ello, y ella no ha firmado todavía. ¡Maldita sea! Tomo su codo, y la conduzco fuera del salón.

_ Esta conversación no ha terminado todavía, le susurro amenazante a medida que entramos en el comedor.

¿Qué más va a pasar esta noche? Estoy molesto, tenso, irritado, confinado, y ahora mismo, me gustaría sacar toda la mierda fuera de ella y mi mierda si fuera necesario. ¡Mierda!

¡Respira Grey, respira! Me recuerdo a mí mismo cuando tiro de la silla de Anastasia junto a mí mientras mis ojos están fijos en ella, mirándola como un halcón. No puedo dejar que se me escape y ella está huyendo de mí. Ni siquiera iba a decirme. ¡Mierda! ¡No puedo respirar! Cierro los ojos, y cuento... muy lentamente... Uno... dos... tres... cuatro... cinco... seis... siete... ocho... nueve... diez...

Aún no hay alivio, ¡Vete a la mierda! Trago. Diez... nueve... ocho... siete... seis... cinco... cuatro... tres... dos... uno...

Se me hace difícil respirar.  Me doy cuenta de que Mia se sienta junto a mí, y toma mi mano apretándola con fuerza, sacándome de mis ensoñaciones. Le sonrío cálidamente.

Un alivio temporal me inunda... hasta que miro hacia  Miss Independencia de nuevo.

I’m Afraid of Losing You by A Rocket to the Moon



1 comment:

  1. Patricia amiga GRACIAS tu ni te imaginas como vigilo esta pagina solo esperando un nuevo capitulo, madre nos tienes pagando penitencia, yo esperaba uno al meno de regalo de navidad je je, espero que hayas pasado una buena navidad y que hayas recibido tu año nuevo junto a tu familia con alegria, te deso lo mejor a ti y a Emine que te puedo decir del cap lo amoooooo y amo mas este Emine escribe especial siempre le da su toque especial de nuevo gracias un besote a las dos.

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